La legislatura esta acabada por más que aún queden unos meses para las elecciones. En realidad los líderes de los partidos ya están en campaña electoral, eso sí el más madrugador ha sido Pedro Sánchez que en realidad está en campaña continua mientras que Albert Rivera parece el más rezagado. Pablo Iglesias siempre esta ahí y Mariano Rajoy por su parte también ha saltado a la arena electoral de manera que empiezan a ser cotidianas sus apariciones públicas.
En cuanto a Alberto Garzón, el candidato de IU a la Moncloa, aparece como una figura desvaída a fuerza de llamar a la puerta de Podemos. Es el quinto en la liza, pero nadie da un duro por IU. Ahora queda saber en qué momento Mariano Rajoy nos convocará a las urnas.
En el PP hay quienes creen que el presidente debería convocar las elecciones ya mismo, es decir para que coincidan con las autonómicas catalanas de septiembre. Otros, que se las dan de bien informados, auguran que serán la última semana de noviembre, y como hay opiniones para todos los gustos, incluso hay quienes señalan que lo mismo se celebran allá por el 13 de diciembre.
Conclusión: nadie sabe nada a ciencia cierta y si alguien lo sabe, calla.
Lo que muchos se preguntan es cuando le conviene más al PP celebrar elecciones y las respuestas también son variadas. Y es que las encuestas indican el enfado profundo del electorado por las políticas llevadas a cabo por el Gobierno Rajoy, esa política de austeridad que ha dejado tantas familias en la cuneta, y que por más que ahora la economía empiece a remontar no es suficiente para paliar los efectos del naufragio social.
Sí, el PP lo tiene rematadamente mal y la remodelación que ha hecho Rajoy en Génova 13 no parece suficiente para que los populares remonten su mala imagen, en definitiva para que los ciudadanos les perdonen por más que el ex presidente Aznar haya dicho que hay tiempo suficiente para dar la vuelta a la situación.
Al día de hoy las encuestas señalan que el PP puede ser el partido más votado pero que no obtendría mayoría suficiente para gobernar, de manera que los resultados de las generales pueden parecerse a los del pasado 24 de mayo, y de ser así, parece factible que el próximo gobierno de España sea una coalición entre el PSOE y Podemos por más que tanto Pedro Sánchez como Pablo Iglesias prefieran no hablar de ese futurible.
Claro que de aquí a las elecciones pueden pasar muchas cosas de manera que nada está escrito de antemano. Lo único evidente es que los líderes están de campaña.
Julia Navarro