Soy cazador de caza menor y pescador de truchas y aunque estoy dispuesto a cumplir la ley, pero no hay derecho a que haya que sacar 17 licencias de pesca o de caza, por culpa de las Autonomías”. No es la primera vez que lo digo, pues ya, hace cerca de 19 años, en el Ateneo, fue la base de mi discurso sobre “el Ser de España”, publicado más tarde en un libro de Foro Jovellanos.
Detesto las grades cacerías como las del Juez Garzón, pero no todos los cazadores o pescadores somos del nivel del citado, pues más que a la caza mayor, que me parece un crimen, sobre todo de ciervos y otros animales de tamaño mayor que un burro, ya que el que esto escribe se dedica a las perdices, los conejos, y las truchas, como Miguel Delibes. ¡Es una forma de estar en el campo, de vivir la naturaleza y sumergirnos en ella, sin importarnos el sol, el viento o la lluvia!
Allí, además, olvidando el estrés, pero, eso sí, con 17 leyes diferentes de caza y pesca, y lo curioso es que, como es difícil cazar o pescar de formas muy distintas, las leyes son sobre “chorradas”. Por ejemplo, en una Autonomía está permitido pescar con cuatro moscas, en otras sólo con tres, en unas con cebo, en otras solo, artificial, en unas con anzuelos con muerte, en otras sin ella, en unas es veda los lunes, en otra los martes, o los jueves. En unas las truchas deben tener 25 cm., en otras 40, en unas hay cupo, en otras no, en unas está prohibido llevar dos cañas, ¡como si se pudiera pescar con dos cañas!, andando todo el día y pasándolas moradas entre vegetación y los ríos, algunos con peligro incluso para la vida, por su caudal, o fallas del terreno. Lo cierto es que tengo que llevar 17 carnets, que hay que comprar en cada Autonomía; unos valen para un año, otros para dos, otros para cinco.
Luego están los permisos, con mil sistemas distintos, en los cotos, para los sorteos, en fin, que hay que andar con el “Aranzadi” bajo el brazo, y si no, multa, cárcel, o lo que sea, incluso el exilio. ¿Qué no se lo creen? Pues La Rioja me envió una carta oficial que si no informaba (yo a la Administración) cuántas truchas había cogido el día X, peso y talla aproximados, etc., no podría pescar en la Comunidad de La Rioja por varios años (exiliado). ¡Vamos, la coña! Pues, para más inri, no me acordaba de haber ido, y es que una boda, o festejo similar, me lo impidió. Eso, y encima truchas no hay, pues la guardería de los ICONA locales brilla por su ausencia, salvo rarísimas excepciones.
En fin, el caos. O es que, en vez de España, estoy en 17 “Españitas”, y valga el ejemplo para denunciar esas Taifas Virreinales, las Autonotaifas, porque, ¿a quién se le ocurre crear 17 Parlamentos? ¿Se imaginan el Corpus Jurídico que habrán producido en los últimos 31 años? No cabe en la Biblioteca Nacional. Menudo negocio para los abogados, pero qué desastre para los ciudadanos y las empresas. Y no crean que sólo es el problema de la lengua, ya que tenemos un territorio, Euskadi, donde es ominoso desplazarse, no sólo por el clima ambiente, sino por la desigualdad que han creado, pues hay 17 Sanidades, 17 Fiscalidades, 17 Educaciones, y lo peor, 17 Virreyes, puesto que tenemos Rey. Cuando había Franco, había tantos “Franquitos” como provincias, y estos Virreyes de sus Taifas viven en Palacios, se suelen llamar barones, con su corte organizada, y si alguno de ellos es corrupto, o lo parece, es una ofensa para su Españita, no para él, que confunde lo público con lo privado (al menos en las últimas declaraciones). Incluso hay uno: Ibarretxe que hablaba del “ámbito vasco de decisión”, y otro hoy Puigdemont el prófugo de La declaración de independencia de Cataluña fue un texto político en el que se proclamó el establecimiento de la República Catalana como un «Estado independiente y soberano, de derecho, democrático y social» aunque su eficacia fue suspendida por el mismo presidente de la Generalidad de Cataluña apenas 44 segundos después de la declaración de independencia.7 Ningún Estado del resto del mundo reconoció este hecho político. Hoy recibe a Ortuzar en su villa de Waterloo y eso poco después de reunirse en un hotel de Bruselas con Yolanda Diaz, vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar, y los demás, ¿qué? Muchos otros como Camps, Montilla, Chaves (condenado ya) y Bono (el de los pisos) etc. en su tiempo, todos a forrarse a costa del Erario público. Es solo que se acabó el carbón y los Reyes Magos del Estado Central, no solo no volverán, sino que están en quiebra técnica.
Habrá que ver cuál es ahora la Deuda de las Autonomías. Creo que tan desmesurada, como todo lo que ha caído en manos de la Casta. Con sus virreyes en sus coches blindados, el enano Perre Aragonés, al frente de la mayor de ellas, Catalunya y el resto sean del PSOE o del PP, viviendo como reyes, en palacios cuya rehabilitación ha costado, sangre sudor y lágrimas al pueblo español.
No contentos los TAIFAS con vivir por nuestra cuenta y casi de establecer fronteras, pasaportes, y algunos de ellos embajadas en el extranjero como Cataluña que llega a las 20 embajadas y Aragonés promete más, los Ayuntamientos también han hecho su agosto y terminado el “boom” de la burbuja inmobiliaria, ahora no saben qué hacer para pagar las nóminas de sus familiares contratados.
Algo habrá que hacer para reconstruir España, y la verdad es que ésta es una de las razones por las que, hace 44 años, me aparté de Suárez y de la UCD y voté en contra de la Constitución de 1978 por no parecerme suficientemente liberal. Un Rey sin referéndum específico para su cargo. Una ley electoral desquiciada que nos ha puesto a los pies de los nacionalistas. Una ley de partidos políticos, donde los mediocres mandan como dueños, al carecer de democracia interna y la invasión de todos los poderes del Estado por el Ejecutivo incluso de las empresas privadas como han hecho las Autonomías con las Cajas de Ahorros. Lo del “café para todos” me pareció una burrada, ¡pues ya lo tienen! ¡No paran de rebuznar! Quién se va a responsabilizar de tanta desmesura y despilfarro Y, como siempre, las coces para los ciudadanos, sus hijos y sus nietos, que pagamos el pato y que andaremos pagando deuda en 2050 o en 3000, ¡y eso que yo estaba hablando de pesca!
Hoy en España y para conseguir la investidura de Pedro Sánchez y que guarde la Moncloa 4 años más, resulta que son necesarios los votos del prófugo Puigdemont, que exige una amnistía como si se pudiera borrar su declaración de independencia, y además dejar de pagar la deuda de Cataluña, dinero que hemos puesto entre las otras 16 más y que tendrían que devolvernos, especialmente a Madrid, que es la que más ha contribuido a la Solidaridad Nacional, Es evidente que va contra la Constitución y es evidente también que el Rey debe oponerse frontalmente a tal disparate, pues en ella figura su papel de defensor de la unidad de España y jefe de sus Fuerzas Armadas.