El Departamento de Seguridad Nacional (DSN) ha analizado el último informe elaborado por la ONU sobre la amenaza que plantea el Daesh para la paz y la seguridad internacionales. Y la principal conclusión que se desprende del documento es que «la amenaza sigue siendo elevada«.
El grupo terrorista y sus organizaciones afiliadas han ido ampliando sus acciones en África, Siria, Irak y Afganistán. Y es precisamente en este último país donde el crecimiento que está experimentando el denominado Daesh-KP (o ISIS-K, por sus siglas en inglés) se ha convertido en un «objetivo prioritario» para los servicios de inteligencia de todo el mundo (entre ellos Estados Unidos o España).
De hecho, en estos momentos «es uno de los grupos terroristas más activos», y está integrado por «células autóctonas y autónomas más difíciles de detectar», según fuentes consultadas por Estrella Digital.
Precisamente en el informe de Naciones Unidas se destaca que esta filial del Daesh, que está asentada fundamentalmente en la región del Khorasan, al norte de Afganistán, pero que opera fuera de ese territorio, «está siendo utilizada para proyectar la amenaza terrorista fuera de sus fronteras, utilizando a las comunidades afgana y de África Central para el apoyo logístico y económico de sus actividades terroristas».
«Los niveles de amenaza terrorista han aumentado en Europa»
Por ello, y según la ONU, el Daesh-KP «supone un incremento significativo del riesgo y un aumento de la preocupación». De hecho, en el análisis se hace constar que «los niveles de la amenaza terrorista han aumentado en Europa» tras el atentado en el Crocus City Hall de Moscú del pasado 22 de marzo en el que fueron asesinadas 140 personas.
Aunque la reivindicación de los atentados fue efectuada por el Daesh, la acción concreta de Moscú «habría sido llevada a cabo por el Daesh-KP, tanto por la nacionalidad de los terroristas, como por los fondos empleados, así como por la preparación de los yihadistas», señalan desde Naciones Unidas.
La amenaza terrorista a través de Internet
El aumento de la propaganda terrorista (sobre todo a través de Internet) para captar adeptos a su causa y expandir el terror es otra fuente de preocupación para los servicios de inteligencia a nivel internacional.
En la actualidad, «esta propaganda llama a la acción violenta contra objetivos vulnerables, incluidas las infraestructuras vitales y los lugares públicos», según Naciones Unidas.
En España, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y organismos como el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) trabajan a diario contra la difusión de contenidos terroristas por Internet para contener la propagación viral de este tipo de amenazas.
El CITCO, en concreto, que este año celebra su 10º aniversario, es el órgano responsable de la gestión y análisis de toda la información estratégica relativa al terrorismo, el crimen organizado y las organizaciones radicales de carácter violento. En la actualidad, tienen más de 12.000 investigaciones abiertas.
De hecho, a nivel europeo es el organismo más avanzado en la retirada de contenidos terroristas de Internet. A modo de ejemplo, y según fuentes del CITCO a las que ha tenido acceso Estrella Digital, ese tipo de contenidos incluyen, por ejemplo, cómo fabricar bombas para cometer atentados terroristas.
Expansión del Daesh en Oriente Medio y África
Siguiendo con el informe difundido por el DSN sobre la amenaza terrorista que representa el Daesh, otro punto caliente de expansión del grupo se sitúa en Oriente Medio.
De hecho, en el documento elaborado por la ONU se deja constancia de que, «pese a los esfuerzos de lucha contra el terrorismo, el riesgo de resurgimiento del grupo se ha materializado a través del aumento del ritmo de sus operaciones en la República Árabe Siria«.
Precisamente en Siria, el Daesh lanzó a principios de enero «una campaña coordinada en sus autoproclamadas provincias y se produjo un incremento de las operaciones tanto en Siria como en Irak», según la información de la que dispone la ONU
Y en relación con África, «los niveles de preocupación se mantienen muy altos», señalan desde Naciones Unidas. «En particular -añaden-, el riesgo de que aumente la propagación de los grupos terroristas conllevaría una creciente área de inestabilidad en toda África Occidental y el Sahel«.
De hecho, el Daesh «ha crecido en importancia y capacidad en Nigeria -prosiguen-, creando células y redes de facilitación en el noroeste de Nigeria y trasladando el apoyo, a través de su filial en la región (el ISWAP, por sus siglas en inglés)» a las operaciones de otros de los grupos que están localizadas en la zona».
También «se ha fortalecido» la filial del Daesh en Somalia, y se han incrementado los atentados terroristas en la República del Congo y Mozambique.
El Sahel, el punto caliente del terrorismo en África
La región del Sahel (Mauritania, Malí, Níger, Burkina Faso, Chad, Sudán, Eritrea y Etiopía) es precisamente la que concentra más de la mitad de los asesinatos por atentados terroristas.
Así lo evidenció el pasado mes de marzo el Instituto para la Economía y la Paz, con sede en Sidney (Australia), en su informe anual sobre la evaluación de la amenaza terrorista correspondiente a 2024.
Según ese informe, la región del Sahel registró alrededor de 4.000 muertes por terrorismo en 2023, lo que equivale al 47 % del total mundial, y el 26 % de todos los atentados de 2023 se produjeron en esta región.