Fue el primer general español que mandó una gran unidad de la OTAN en operaciones. En concreto, en Bosnia-Herzegovina. Y su último cargo en activo lo desempeñó como jefe del Estado Mayor de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra.
El general Marín Bello, ya retirado, ha analizado para ESTRELLA DIGITAL el conflicto en Oriente Medio tras la intervención de Irán en los combates que están enfrentando a Israel y al grupo terrorista Hezbolá en Líbano. Y lo primero que pone sobre la mesa es que, en su opinión, «el conflicto en Oriente Medio no tiene solución».
A su juicio, y sobre la base de que «hay conflictos que pueden tener solución y otros que permanecen», en el caso que nos ocupa él se remite a lo ocurrido tras los acuerdos de Camp David, en 1978, para afirmar rotundamente que la guerra entre israelíes y palestinos «desafortunadamente es irresoluble».
«La única vez que hubo un acercamiento y posibilidades reales de resolución del conflicto entre ambas partes fue en los acuerdos de Camp David -recuerda-, que firmaron en 1978 el entonces presidente egipcio, Anwar el-Sadat, y el primer ministro israelí, Menájem Beguín«. Ambos recibieron el Premio Nobel de la Paz por llegar a ese punto de inflexión, que trazaba un nuevo panorama en la región.
«Pero, poco después, ambos dirigentes fueron acusados de traidores y asesinados por su propia gente», condena enérgicamente, e insiste en que fueron «los suyos, su propia gente, sus propios pueblos, los que no quisieron poner solución al conflicto».
«El conflicto entre Irán e Israel es un vals de hostilidad controlado»
En estos momentos, y según su opinión, «Israel está llevando a cabo una operación de envergadura en Gaza y no quiere otros frentes abiertos», pero, a continuación de este razonamiento, él está convencido de que «el escenario al que estamos asistiendo, con una evidente escalada del conflicto tras la intervención de Irán, «es un vals de hostilidad, en el que todas las partes quieren fijar sus posiciones pero también tienen claro que no se van a destruir«.
Es, y lo comenta coloquialmente, un «postureo», un «conflicto controlado», en el que Israel e Irán «deben aparentar ser enemigos pero sin llegar a destruirse». El problema, y así lo destaca, con alto grado de indignación en su tono de voz, «es que alguien tiene que pagar la fiesta… y ese ‘alguien’ es el pueblo palestino y los civiles de Líbano».
«La misión de la ONU en Líbano es muy frágil»
En relación con Líbano, y concretamente con la misión de Naciones Unidas en el país (UNIFIL, por sus siglas en inglés), Marín Bello, que ha tenido experiencia en este tipo de operaciones multinacionales, considera que se trata «de una misión muy frágil», en la que las tropas desplegadas (entre ellas 650 españoles) «no pueden adoptar una postura de fuerza porque no se trata (como ocurrió en Bosnia-Herzegovina cuando él mandó a los soldados de la OTAN desplegados en la zona) de una misión de imposición de la paz».
Y ante este panorama, «y con un estado (Líbano) que también es frágil porque el conflicto entre israelíes y palestinos se está llevando, y se ha llevado, a muchos países por delante», los soldados de la ONU «no pueden actuar». De hecho, continúan recluidos en búnkeres, pero UNIFIL, a pesar de «tener las manos atadas por el propio carácter de la misión», ha rechazado la petición israelí de llevar a cabo un repliegue parcial de la zona.
«La 3ª Guerra Mundial ya hace tiempo que está en marcha»
Al preguntarle sobre si estamos asistiendo al inicio de una 3ª Guerra Mundial, no puede evitar una leve carcajada al afirmar que «la 3ª Guerra Mundial ya hace tiempo que está en marcha».
En cualquier caso, también quiere poner sobre la mesa que, «aunque las crisis se controlan a través de acuerdos que están por encima de nosotros», en lo que respecta al conflicto de Oriente Medio «vamos a vivir con él toda nuestra vida».
«Va a ser una eterna disputa -insiste-, porque hemos pasado de las guerras convencionales, en las que morían centenares de personas, a guerras en las que, por ejemplo, tener armas atómicas (caso del conflicto entre India y Pakistán, que ambos la tienen y ‘no se hacen nada’) es un seguro de vida… y se sabe que Irán la está desarrollando e Israel la tiene desde hace mucho tiempo».
Por tanto, y a modo de conclusión, Marín Bello opina que «observando los decenios que lleva este conflicto, las soluciones que se han buscado y las intenciones de los contendientes… no tiene visos de solución a medio-largo plazo».