Este 13 de octubre, las fuerzas de paz de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL) han denunciado una grave violación de la Línea Azul, la frontera entre Israel y el Líbano establecida por la ONU. Según han informado a través de un comunicado, soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) cruzaron esta línea e irrumpieron en una posición de las Naciones Unidas situada en la localidad libanesa de Ramyah.
Alrededor de las 4:30 horas de la madrugada, tres pelotones de las FDI cruzaron la Línea Azul y dos tanques Merkava destruyeron la puerta principal de la base de la FPNUL, entrando por la fuerza. A pesar de las repetidas protestas de los soldados de paz a través del mecanismo de enlace de la ONU, los tanques permanecieron en la base durante unos 45 minutos antes de retirarse. El personal de la FPNUL advirtió que la presencia de las tropas israelíes representaba un peligro directo para la seguridad de los efectivos de la ONU.
Pero el conflicto no terminó con la retirada de los tanques. A las 6:40 am, los cascos azules informaron de varios disparos en las inmediaciones, seguidos de una densa nube de humo a unos 100 metros al norte de su posición. Aunque el personal utilizó máscaras protectoras, quince efectivos de la FPNUL sufrieron irritaciones en la piel y problemas gastrointestinales, por lo que están recibiendo tratamiento médico.
Y esto no fue lo único que ocurrió. La FPNUL también denunció que este viernes, soldados israelíes bloquearon un movimiento logístico esencial cerca de Meiss ej Jebel, impidiendo que las fuerzas de paz completaran una operación crítica en la zona.
La FPNUL ha recordado, por cuarta vez en solo dos días, a las FDI y a los actores involucrados que deben respetar las obligaciones internacionales de protección del personal de la ONU y la inviolabilidad de sus instalaciones. Destacaron que cualquier ataque deliberado contra las fuerzas de mantenimiento de la paz constituye una grave violación del derecho internacional humanitario y de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, adoptada en 2006.
El organismo ha solicitado una explicación formal a las FDI por estas “impactantes” violaciones. La resolución 1701 establece la libertad de movimiento de las fuerzas de paz en la región, y cualquier restricción a esta libertad se considera una violación grave. La ONU insiste en que debe garantizarse en todo momento la seguridad de su personal y de sus instalaciones, un principio fundamental del derecho internacional que en esta ocasión, afirman, ha sido vulnerado de forma flagrante.
La tensión en la frontera entre Israel y el Líbano continúa y estos hechos suponen un desafío directo al mandato de las fuerzas de paz que operan en la zona.
Otro casco azul herido en Líbano, esta vez «por disparos», y ya van cinco en menos de tres días