La operación se enmarca en un operativo a nivel europeo que ha decomisado 22.000 toneladas de productos ilícitos y 850.000 litros de bebidas en 29 países, con un valor total en bienes incautados de más de 91 millones de euros.
Esta operación, centrada en alimentos y bebidas alcohólicas falsificadas, adulteración económica y seguridad alimentaria, ha llevado a la Guardia Civil a realizar más de 3.000 inspecciones y registros en centros de distribución, almacenes, medios de transporte, puertos y aeropuertos de toda España. En dichas intervenciones se detectaron 2.200 infracciones administrativas, subrayando la envergadura del problema.
Redes delictivas desarticuladas en varias comunidades autónomas
Una parte significativa de la operación se centró en la protección de productos con Denominación de Origen (DOP) y otros alimentos de calidad, área en la que la Guardia Civil organizó una reunión de coordinación en Alicante junto con EUIPO y Europol.
En La Rioja, la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil, en colaboración con el Arma de Carabinieri de Italia y Europol, incautó 120.000 botes de conservas de atún y 45.000 litros de aceite. Cuatro personas fueron detenidas, propietarios de una empresa conservadora en Alfaro, que etiquetaban conservas de atún de baja calidad y aceite de girasol como productos de mayor categoría y coste, vendiéndolos a precios competitivos al falsificar su contenido.
En Madrid, el SEPRONA, junto a las Autoridades Sanitarias de la Comunidad de Madrid, intervino en una nave en Valdemoro, decomisando 642 garrafas de aceite, 104 jamones y 207 quesos. Los productos, en su mayoría aceites de mezcla y jamones etiquetados como ibéricos sin trazabilidad, eran comercializados como productos de alta calidad. Una persona fue detenida y otras cuatro investigadas por delitos contra la salud pública, y falsificación documental.
En Valencia, el SEPRONA inmovilizó 80.000 kilogramos de encurtidos no aptos para el consumo, donde se añadían colorantes y conservantes prohibidos. En el operativo, el gerente de la empresa fue detenido bajo sospecha de delitos contra la salud pública y seguridad de los consumidores.
En Sevilla, las inspecciones llevaron a la detención de 11 personas y la investigación de otras 6 involucradas en una red de distribución de aceite de oliva virgen extra (AOVE) adulterado con aceite de girasol y otras mezclas. Además, SEPRONA descubrió a empleados de una empresa que manipulaban la fecha de caducidad de productos pesqueros, inmovilizando más de 45.000 kilogramos de alimentos en mal estado.
Por último, en Málaga, se desmanteló otra organización dedicada a la venta de alimentos refrigerados y congelados, incluidos embutidos, pizzas y huevos, cuya caducidad era alterada para su venta. En este caso, se detuvo a 8 personas y se incautaron 1.800 kilogramos de productos caducados o sin etiquetar.
Análisis de tendencias
La operación Opson ha contado con la colaboración de diversas consejerías autonómicas, la Dirección General de la Industria Alimentaria (DGIA) y la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN). Los expertos han identificado una tendencia preocupante de reutilización de alimentos caducados, especialmente en el aceite de oliva y vinos con Denominación de Origen Protegida, donde los productos, tras ser desechados, vuelven a circular con fechas de caducidad modificadas.
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