Sabemos que Miley Cyrus nunca deja indiferente a nadie con sus actuaciones en el escenario, pero esta vez y tras su último espectáculo, muchos de los comentarios en las redes sociales no son precisamente positivos. Y es que aunque la cantante norteamericana nos tiene acostumbrados a sus poses provocativas, en esta ocasión parece haber rebasado el límite. La que fue por mucho tiempo la chica Disney por excelencia no ha sabido separar del todo lo erótico de lo pornográfico y ha roto todos los esquemas en su última actuación. Un muñeco hinchable fue su mayor aliado encima del escenario, con el que consiguió subir la temperatura entre los asistentes y cómo no, provocó que los comentarios ardieran por medio de las redes sociales.
Aunque ya sabíamos que la cantante quiso separarse completamente de la inocente imagen que le confería su papel como Hannah Montana y a pesar de que a veces parece que sigue siendo la misma con algunos detalles, como el que ha tenido felicitando a su mamá en el Día de la Madre a través de Instagram, muchos piensan que su cambio ha sido excesivo y que Miley no les engaña. La extravagancia con la que actúa encima de los escenarios siempre ha sido muy notable pero, no contenta con eso, Miley ha decidido esta vez representar escenas sexuales con un muñeco hinchable, llegando incluso a practicar sexo oral con aquel trozo de plástico.
Pero la cosa no quedaba ahí y ya que el ambiente estaba muy caldeado, Miley decidió acercarse a sus seguidores para besarse con diversas personas del público e incluso se acercó para que pudiesen tocarle sus partes más íntimas, como las piernas y el pubis. Las escenas que protagonizó sobrepasaron los límites a los que la cantante nos tiene acostumbrados y aún quedaba más por enseñar. Para rematar su espectáculo, la cantante hacia protagonista del momento a un pene gigante con el que jugó durante algunos minutos. La norteamericana se montó sobre el, lo chupó y hasta llegó a lanzarlo. Al parecer, en su último concierto ya no interesaba tanto su música si no que lo que primaba eran sus jueguecitos sexuales, ya que se mostró entregada al sexo en la mayor parte del concierto.
Algunos de los comentarios que ha recibido la norteamericana a través de las redes sociales no la han dejado en muy buena posición y es que, según muchos de ellos, una cosa es querer separarse de la dulce imagen que hacía llegar con su papel de chica Disney y otra muy diferente empezar a mezclar lo erótico o provocativo con algo pornográfico. «¿En qué se ha convertido Miley? Esto no es aceptable», «Me gusta Miley pero a veces va demasiado lejos» o «Bueno… La Miley Cyrus esta canta bien y vale, todo muy guay, pero pienso que ya se está pasando un poco bastante», hacen notable la reacción de sus seguidores ante sus extravagantes decisiones encima de los escenarios.