La princesa Mette- Marit y su marido, el príncipe Haakon de Noruega, han tenido un aniversario de lo más negro. El pasado martes, día en el que celebraban sus 14 años de matrimonio, un aparatoso accidente de tráfico impidió que pudieran disfrutar de este día tan conmemorativo.
El coche donde viajaba Mette-Marit como copiloto fue golpeado por otro, colisión que provocó que el cuello de la aristócrata se viera resentido, pues ya en 2008 tuvo que ser operada tras una dolorosa caída en un viaje oficial a Ucrania.
Por este motivo, la directora de comunicación de la casa real noruega convocó una rueda de prensa para comunicar el estado de salud de la princesa. A pesar de que el impacto fue menor, Marianne Hagen aseguró que la esposa de Haakon decidió cancelar toda su agenda de eventos para descansar y “asegurarse que su cuello estaba en condiciones”. La princesa tenía previsto asistir a una conferencia de la ONU sobre la igualdad de género y tuvo que ser su marido quien acudiera en su nombre.