La corrida era de El Pilar, pero fue remendándose con el hierro de Borja Prado y terminó con un Torrealta que fue el gran protagonista de la tarde en Albacete al acabar mandando a José María Manzanares al hospital.
El diestro estaba a punto de quitarle la vida con el descabello cuando el animal arremetió contra él provocando una brutal cogida que se saldó con un traumatismo craneal y cervical, pendiente de un TAC y un estudio radiológico.
El diestro, que recobró el conocimiento en la enfermería, ya que el golpe le dejó completamente groggy, pasará la noche en el hospital para ver cómo evoluciona.
Hasta ese momento, el Fandi no había aprovechado la templanza de un toro de Borja Prado y se perdió con circulares invertidos y molinetes de rodillas. Pese a todo su gran tercio de banderillas y el hecho de liquidar a su enemigo con una media estocada arriba le había valido una oreja.
Después de él todo mermó con Sebastián Castella, que no aprovechó un buen Torrealta, un hermano del que mandó luego a la enfermería a Manzanares, ni en su segundo ejemplar, que sin embargo, por la benevolencia del público, casi le da una oreja.