Magalluf, en Mallorca, lo puso de moda, y ahora parece que ha llegado a México, aunque las autoridades de este país han tomado ya medidas más drásticas que en España para intentar que no se extienda.
La conocida discoteca Capezzio, ubicada en el mexicano puerto de Veracruz, puede dar fe de ello ya que acaba de ser clausurada por el escándalo que se ha montado al conocerse lo que se hacía en su interior.
Sobre todo a través de un vídeo en el que se ve en su escenario cómo una jovencita muy dispuesta le practicó sexo oral a un muchacho a cambio de una botella de licor, -un «pomo cono», como le llaman por esos lares-.
Vamos, lo mismo que ocurrió ya en julio de 2014 en la localidad mallorquina de Magaluf, aunque en esa ocasión la protagonista tuvo mucho más trabajo para conseguir sus copas, ya que les tuvo que hacer felaciones a 24 jóvenes.
Su «copia mexicana» fue jaleada por el mismísimo propietario del local, Juan Santiago, que fue un profesional de la TV Azteca y que ahora además ejerce como locutor de radio y animador de fiestas.
Al ver las imágenes, el gobernador de Veracruz, el priista Javier Duarte, escribió en Twitter «Exhorto a la @FGE_Veracruz y a las autoridades mpales @veracruzgob a revisar la situación legal del centro nocturno Capezzio de Veracruz», y poco después la clausura se hacía efectiva.
Llegados a ese punto entraron en juego las redes sociales, a las que no les gustó mucho el cierre del local como se puede apreciar en «tweets» como «la mamada más cara en la historia de Capezzio», «desapariciones, asesinatos, robos, extorsiones, deudas, entre un sin fin de situaciones no gratas y se focalizan en un antro. CapezziodeHumo», o «ya dejen a la gente coger y hacer mamadas en público en paz, no le hacen mal a nadie… Hay problemas más grandes y gordos en Veracruz».