Meadow Walker, la hija del conocido actor Paul Walker -que perdió la vida tras un brutal accidente con su Porsche Carrera GT en 2013-, ha demandado a Porsche, alegando que el coche en el que iba su padre es «muy peligroso y no debería estar en la calle».
Los abogados de la familia Walker aseguran que el vehículo deportivo se incendió después del brutal impacto debido a varios defectos de diseño y que el actor murió «quemado vivo» en el interior.
Según explica la demanda, el cinturón de seguridad rompió las costillas y la pelvis del actor, que aún seguía con vida, cuando minuto y medio después del choque, el Porsche Carrera GT comenzó a arder con el intérprete aún en su interior.
Además, la familia de Paul Walker sostiene que el vehículo tan solo iba a 114 kilómetros por hora y no a 140 como está señalado en el atestado policial.
La conclusión de la demanda interpuesta contra la empresa alemana es que «el Porsche Carrera GT es un coche peligroso que no debería estar en circulación. Y no deberíamos estar sin Paul Walker ni sin su amigo, Roger Rodas». según recoge TMZ.