A Eva le robaron su teléfono móvil el jueves 7 de marzo en el metro 504 de la línea 5 de Barcelona, y desde entonces no puede «comer ni dormir» pensando en todas las fotos perdidas de su niña, sus primeras clases de patinaje, su primer baño en el mar o las fotos junto a sus abuelos.
Para intentar recuperarlo, Eva ha inundado de carteles los pasillos del metro de Barcelona, en los que describe su móvil y ofrece una recompensa de 500 euros para que se lo devuelvan.
Eva ha explicado que el jueves 7, entre las estaciones de Diagonal y Verdaguer, de camino a su trabajo a las 8.30 horas, alguien le abrió el bolso en el primer vagón del metro 504 de la línea azul del suburbano de Barcelona y se llevó su móvil, modelo Samsung S7 negro con una foto en su fondo de pantalla de su hija pequeña «con un pijama rosa sobre un sofá color verde».
Inmediatamente, cuando se apeó en la estación de Verdaguer se percató de que su móvil había desaparecido y denunció la sustracción a los Mossos d’Esquadra, confiando en que todos los datos detallados sobre el robo que tenía sirvieran a la policía autonómica para visualizar la grabación de seguridad -en el metro de Barcelona hay más de 4.000 cámaras de vigilancia- e identificar al ladrón o ladrones.
Ante la desesperación por haber perdido las fotos hechas en los últimos nueve meses a su pequeña, que tiene 4 años, Eva decidió poner anuncios en las estaciones del metro de Diagonal, Verdaguer y Sagrada Familia, ofreciendo 500 euros a quien encontrara o le devolviera el móvil para «pasar las fotos a una memoria externa».
Eva asegura que varias personas han contactado con ella para interesarse por su caso y para ofrecerle ayuda respecto a la recuperación de los datos del móvil perdido, después de que su anuncio se haya hecho viral en las redes.
«La copia de seguridad del móvil había fallado, desde julio de 2018 el dispositivo no hacía copia de las fotos, así que he perdido todas las fotos de estos meses; las primeras clases de patinaje, las fotos de las vacaciones, su primer baño en el mar, las fotos con sus abuelos -que están enfermos-…», ha sollozado Eva en su conversación con Efe.
Eva no ha recibido aún «ninguna información por parte de los Mossos ni sobre la visualización de las cámaras de seguridad ni sobre la identificación de los que se llevaron su móvil» y todos sus recuerdos; aunque no pierde la esperanza sabe que «es casi imposible recuperar su teléfono, que a estas alturas probablemente esté vendido por piezas».
La víctima insiste: el móvil robado tiene IMEI terminado en 1465 y lleva tarjeta Yoigo y otra SD; llevaba funda transparente y protector de pantalla.
«Solo tengo ganas de llorar. Si te lo han vendido o lo has encontrado me es igual, no haré preguntas, pago 500 euros al contado en efectivo. Solo quiero pasar las fotos a una memoria externa. En caso de que esté reseteado también me interesa porque hay posibilidad de recuperar las fotos. En ese caso pago 400 euros y 100 euros más al recuperar las fotos», ha escrito en los carteles Eva, que ha habilitado el correo [email protected] para recibir cualquier comunicación.
Laia Mataix