Nacido en Osuna (Sevilla) en 1960, el obispo Mazuelos fue ordenado sacerdote en 1990, se licenció en Teología Moral y es especialista en Bioética. Fue delegado diocesano en la Universidad para la Pastoral Universitaria, canónigo penitenciario de la Catedral de Sevilla y en 2009 fue nombrado obispo de Jerez de la Frontera por Benedicto XVI.
En su rueda de prensa de despedida, Francisco Cases ha asegurado que el balance que se lleva después de tantos años ejerciendo en las islas es de «alegría y cariño» y ha calificado a la sociedad canaria y sus gente de «muy acogedoras».
El obispo saliente ha explicado que hasta la toma de posesión de Mazuelos ejercerá como obispo administrador apostólico de la Diócesis de Canarias, al igual que los tres vicarios, que continuarán en sus cargos hasta el mismo momento tras haber sido ratificados durante la mañana de este lunes.
Francisco Cases ha explicado que no le espera «un destino nuevo», sino que pasará a ser obispo emérito una vez que su sucesor haya tomado posesión del cargo, un acto que esperan pueda llevarse a cabo en breve y en el que ya están trabajando.
Además, ha adelantado que una vez deje de ser obispo administrador de la Diócesis de Canarias regresará a Alicante a vivir en la Casa Sacerdotal, donde espera poder «echar una mano» en alguna parroquia, aunque sin responsabilidad.
El actual obispo administrador de la Diócesis de Canarias recibió el pasado 17 de junio una carta del papa en la que se aceptaba su renuncia, mientras que este 4 de julio recibió la confirmación de que de manera oficial su sucesor en el cargo sería el actual obispo de Asidonia-Jerez.
Por su parte, el vicario general de la Diócesis de Canarias, Hipólito Cabrera, ha considerado que Francisco Cases Andreu ha hecho en Canarias «su trabajo y su tarea» y ha destacado sus ganas de conocer «su Diócesis y sus pueblos» desde que aterrizó en el archipiélago, hace quince años.
Cases ha leído este lunes en el anuncio oficial de su renuncia una carta que la Diócesis ha recibido del que será el nuevo obispo, y de ella ha destacado el número de veces que Mazuelos ha hecho referencia a las palabras «alegría» y «corazón».
Además, ha apuntado que el nuevo obispo es médico y ejerció la medicina durante su servicio militar, hasta que en 1985 ingresó en el seminario. En la actualidad, Mazuelos es Presidente de la Comisión de Familia de la Conferencia Episcopal.
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