La tubería era la única conducción de agua de la parte baja del valle de Aridane, y llegaba desde el municipio de Tazacorte, con lo que ahora no se pueden regar las producciones más cercanas a la costa.
La previsión es que este lunes lleguen a La Palma las dos desaladoras portátiles que ha adquirido el Gobierno de Canarias, con capacidad cada una de ellas de 3.500 metros cúbicos, y la calidad del agua deberá ser validada antes de utilizar.
El agua que pase por estas desaladoras se destinará al riego en la zona de los Llanos de Aridane próxima a Tazacorte, mientras que el área cercana a Fuencaliente continuará sin riego, por lo que hay descontento entre quienes trabajan en el sector platanero en la parte que no recibirá agua.
El problema «más gordo» afecta a la zona de exclusión, en la que hay agua pero si se tiene una finca con riego a manta y no por aspersión, no se puede entrar, ha indicado a Efe Antonio Ríos, que es técnico agrícola y agricultor.
Antonio Ríos ha indicado que entre la lava y la falta de agua se perderán «un montón» de hectáreas de plataneras en la zona baja de Los Llanos de Aridane.
Algunas de las fincas en las que trabaja Antonio Ríos están en la zona de exclusión, en las que no se puede entrar debido a que es peligroso por la presencia de gases producto de la erupción volcánica que comenzó el pasado 19 de septiembre.
Antonio Ríos ha recordado que el plátano es «agua pura», por lo que si no hay agua desaparece, y ha añadido que en la zona de exclusión ni se pueden pisar las fincas, a pesar de lo cual mucha gente pide entrar para regar.
Da por perdida una finca a la que no puede acceder porque la lava se ha acercado hasta un metro de distancia, y que está en la zona de costa y próxima a un almacén de productos fitosanitarios que la semana pasada la Guardia Civil vació porque podría llegar la colada en los próximos días.
Antonio Ríos entiende que no se pueda acceder a esa finca, que está en una zona agrícola «muy rica».
Ha comentado que este lunes se puede entrar a cortar fruta por la zona de El Remo pero con el tiempo contado y organizados por la Guardia Civil.
Para regar la zona afectada por la rotura de la tubería también está previsto enviar desde territorio peninsular un buque cisterna con 30.000 metros cúbicos de agua, anunció el pasado sábado el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres. EFE
Rubén Darío García León