Al inicio de la sesión de la comisión, su presidenta, Norma Pujol i Farré, ha anunciado que el debate de dicha declaración, promovida por Unicef, decaía del orden del día «por no tener consenso y unanimidad entre los distintos grupos parlamentarios».
El motivo para que la formación liderada por Santiago Abascal no haya apoyado la iniciativa ha sido la referencia a la Agenda 2030 que consta en la declaración instiucional, tal y como ha señalado la portavoz socialista en la comisión, Cristina López.
«Sigo sin entender la animadversión de la extrema derecha por la Agenda 2030, un plan de acción a favor de las personas, el planeta, la prosperidad y que intenta fortalecer la justicia y la paz universal. Por favor, háganselo mirar, ¿qué planeta quieren dejar a las siguientes generaciones?, ha cuestionado López.
Desde Vox, el diputado Pablo Juan Calvo no se ha referido de manera expresa a su rechazo a la declaración, si bien durante el debate de una moción ha criticado que «el globalismo progre todo lo ocupa con la tan manida Agenda 2030, auspiciada por la izquierda pero que todos la aceptan sin dar batallas para que no sean etiquetados». «Todos menos Vox», ha aseverado.
Para la portavoz de Unidas Podemos Lucía Muñoz, «es muy grave» que en el seno de la Comisión de Derechos de la Infancia y Adolescencia no se haya podido aprobar por unanimidad una declaración institucional «porque el partido de la ultraderecha no ha querido».
«Este tipo de comportamientos degradan enormemente el trabajo de esta comisión», ha reprochado Muñoz al tiempo que la portavoz de ERC María Carvalho ha calificado de «surrealista» el veto de Vox.
También ha lamentado la negativa de Vox el diputado socialista Juan Cuatrecasas: «Es terrible tener que aguantar desplantes de este tipo cuando hablamos de niños y niñas», ha escrito en su perfil de Twitter. EFE
A.M.