Se trata de uno de esos bruscos cambios de tiempo habituales en la primavera, que de una situación de verano se pasa a una claramente invernal «con temperaturas invernales más propias de finales de febrero y comienzo de marzo», ha avanzado Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Mañana aumentará la inestabilidad en casi todo el país con lluvias fuertes en el norte, centro y este de la Península, sin descartar nevadas en montaña del extremo norte; ante esta situación la Aemet ha activado el aviso amarillo (riesgo) en Aragón y Castilla-La Mancha por fuertes lluvias, y en La Rioja y Castilla-La Mancha por nevadas.
Del Campo ha detallado que este día, las temperaturas se desploman con «una bajada notable e incluso extraordinaria», con 10 grados menos en el norte y en el centro peninsular; en capitales de provincia como, por ejemplo, Valladolid pasarán de 24 grados hoy a 12 grados mañana, Burgos de 18 a 8 grados y en Madrid de 26-27 grados a 16 grados.
Respecto a la cota de nieve, se situará ese día en la cantábrica a 1.000/1400 metros bajando a 900/1.400 metros, en Pirineos y sistemas Ibérico y Central entre 1.400/.2000 metros bajando a 900/1.400 metros y en el sudeste a 1.800/2.000 metros.
El miércoles se prevén precipitaciones casi generalizadas por la borrasca, que pueden ser fuertes o persistentes en un amplio entorno de Castellón, Tarragona y este de Aragón, sin descartar Murcia o Alicante, e irán acompañadas de tormentas ocasionales en amplias zonas de la Península como Baleares, Estrecho y Alborán.
Esa jornada, la cota estará en la Cantábrica occidental entre 700/900 metros subiendo a 900/1.200 metros, en Pirineos occidentales en 700/1.000 metros subiendo a 1.000/1.400 metros, en los orientales 1.000/1.600 metros subiendo a 1.200/1.800 metros, en el Ibérico entre 900/1.200 metros, en el Sistema Central entre 700/1.000 metros subiendo a 1.000/1.400 metros y en el sudeste a 1.000/1.400 metros.
Las temperaturas seguirán bajando en casi todo el país con valores, entre 5 y 10 grados por debajo de lo normal para esta época del año en amplias zonas del país y entre 10 y 15 grados menos en el sur de Aragón y este de Castilla-La Mancha, ha precisado el portavoz.
El jueves será «un día de transición entre la borrasca mediterránea que se va y una borrasca atlántica que llega» a las costas de Galicia por lo que, ese día, son probables lluvias débiles en Galicia, que se irán extendiendo a zonas próximas.
A partir del viernes, -ha señalado Del Campo- las lluvias se extenderán ya por todo el oeste y centro del país y probablemente se mantenga la situación de inestabilidad y lluvias a lo largo del fin de semana.
Estrella Digital