Un reciente estudio realizado por el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua del CSIC en Barcelona ha puesto en tela de juicio la seguridad de los suelos de caucho, ampliamente utilizados en parques infantiles por su capacidad para amortiguar caídas y su resistencia a las inclemencias del tiempo.
El equipo de investigadores, liderado por la Dra. Ethel Eljarrat, ha encontrado sustancias tóxicas relacionadas con disruptores endocrinos en estos suelos, especialmente aquellos fabricados con neumáticos reciclados.
Estos disruptores endocrinos, según el estudio, pueden imitar la acción de las hormonas y alterar el funcionamiento corporal, lo que podría aumentar el riesgo de enfermedades como cáncer, obesidad, diabetes y problemas de neurodesarrollo en los niños.
Además de las preocupaciones sobre la toxicidad, los suelos de caucho también presentan riesgos de sobrecalentamiento durante el verano. En episodios de calor extremo, pueden alcanzar temperaturas de hasta 70°C, representando un peligro para los niños que juegan sobre ellos.
La Dra. Eljarrat ha destacado la falta de pruebas exhaustivas sobre la inocuidad de los materiales reciclados utilizados en estos suelos antes de su implementación en parques infantiles. También ha señalado la necesidad de investigar si los niños pueden inhalar o ingerir micropartículas de caucho mientras juegan, lo que podría plantear riesgos adicionales para su salud.
Esta investigación plantea interrogantes sobre la seguridad de los suelos de caucho en los espacios de recreo infantil y destaca la importancia de realizar evaluaciones rigurosas de los materiales utilizados en entornos donde los niños pasan mucho tiempo. Los resultados de este estudio podrían influir en las políticas municipales relacionadas con la seguridad y la salud en los parques infantiles.