La Dirección General de Tráfico continúa con su firme compromiso de mejorar la seguridad vial y reducir la mortalidad en las carreteras españolas. En esta línea, la DGT ha decidido implementar una medida que afecta directamente a los conductores profesionales, como taxistas, transportistas y conductores de VTC, entre otros.
En breve, el Reglamento General de Conductores será modificado para reducir la tasa máxima permitida de alcoholemia para estos profesionales, pasando de 0,25 mg/l a 0,10 mg/l. Esta medida, que prácticamente obliga a los conductores a no consumir nada de alcohol si van a ponerse al volante, busca disminuir los riesgos asociados a la conducción bajo los efectos del alcohol.
Las multas por exceder esta nueva tasa oscilarán entre los 500 y 1.000 euros, lo que refuerza la intención de la DGT de disuadir a los conductores de beber antes de conducir. Aunque este cambio aún no es oficial, se espera que entre en vigor dentro de muy poco tiempo.
Además de proteger a los conductores profesionales, esta reducción también busca concienciar a todos los conductores sobre los peligros de conducir bajo la influencia del alcohol. La DGT ha comenzado por este colectivo, pero esta medida podría ser un adelanto de futuras normativas que afecten a todos los conductores.
Una de las propuestas más solicitadas por la ciudadanía es establecer una tasa de alcoholemia de 0,0 para todos los conductores. Con ello se lograría una ley más clara, eliminando cualquier ambigüedad sobre la cantidad de alcohol segura antes de conducir, y simplificando así el cumplimiento y la aplicación de la ley. Incluso pequeñas cantidades de alcohol pueden afectar habilidades esenciales para la conducción, como el tiempo de reacción, la coordinación y la toma de decisiones. Reducir la tasa a 0% disminuiría significativamente el riesgo de accidentes causados por conductores bajo los efectos del alcohol.
Particularmente, los conductores jóvenes, inexpertos y profesionales, como conductores de autobuses y camiones, son grupos especialmente vulnerables al alcohol. Una política de 0% ofrecería una mayor protección a estos grupos y a todos los usuarios de la carretera.
Con esta medida, la DGT sigue dando pasos firmes para hacer de las carreteras españolas un lugar más seguro, reafirmando su compromiso con la reducción de la mortalidad y la mejora continua de la seguridad vial.