El debate sobre los riesgos de las bebidas energizantes ha cobrado fuerza en el ámbito de la salud pública, especialmente por sus efectos adversos en los adolescentes debido a su alto contenido en cafeína. Sin embargo, una nueva y preocupante tendencia está ganando adeptos entre los jóvenes, el consumo de cafeína en polvo a través de la inhalación nasal, una práctica importada de Estados Unidos que ha comenzado a extenderse en España.
Ante esta situación, la organización FACUA-Consumidores en Acción ha solicitado al Ministerio de Sanidad que tome medidas para regular el acceso de los menores a productos con altos niveles de cafeína, incluyendo aquellos que se presentan en formato de polvo.
A través de un comunicado, la asociación expresó la semana pasada, su inquietud por los posibles daños que el consumo descontrolado de estas sustancias podría ocasionar en la salud de los adolescentes, señalando la falta de restricciones en la venta de estos productos, lo que facilita su uso indebido.
FACUA ha detectado que en el mercado español ya se están comercializando productos de cafeína en polvo que fomentan su consumo mediante inhalación nasal. La organización ha señalado la preocupación que genera la venta de estos productos, citando específicamente el caso de la marca Energy Sniff. Esta empresa distribuye cafeína en polvo y sugiere en las instrucciones: «Recomendamos que te eches en el dorso de la mano el tamaño de un guisante de producto para inhalarlo. Según la energía que necesites. Podrás repetir cada 1-2 horas. No te pases con la dosis diaria de un gramo ni hagas más de diez inhalaciones por orificio nasal».
FACUA subraya que «este caso es especialmente alarmante, no solo por la alta concentración de cafeína que, si se abusa de ella, puede ocasionar serios problemas de salud, sino porque la forma de consumo se asemeja a la de ciertas drogas ilegales como la cocaína».
La organización resalta que el acceso sin restricciones a este tipo de productos es particularmente preocupante para los menores, quienes pueden consumir cantidades de cafeína peligrosas para su desarrollo. Este consumo excesivo podría tener graves repercusiones para la salud, algunas de ellas irreversibles.
Normativa actual y falta de regulación
El Real Decreto 906/2003, que establece las normas de etiquetado para productos alimenticios que contienen quinina o cafeína, señala que «el consumo diario de cafeína en niños puede causar cambios temporales en el comportamiento, como mayor excitación, irritabilidad, nerviosismo o ansiedad».
Ante esto, FACUA subraya que «si ya se reconoce que las bebidas energéticas pueden tener efectos adversos en los menores, el peligro es aún mayor con la cafeína pura en polvo, debido a la facilidad con la que se puede consumir en exceso».
La organización recalca la necesidad urgente de implementar regulaciones que limiten el acceso de los menores a estos productos y frenen la expansión de esta peligrosa práctica.