El aclamado director manchego compite en la 81ª edición de la Mostra con su primera película en inglés, La habitación de al lado. La cinta, protagonizada por dos grandes actrices de renombre internacional, Tilda Swinton y Julianne Moore, destaca en un festival que sigue consolidándose como uno de los principales escaparates del cine mundial.
La habitación de al lado es un drama que explora la relación entre una madre, interpretada por Swinton, y su hija, quienes están distanciadas por un profundo malentendido. A su lado, Ingrid, el personaje encarnado por Moore, actúa como depositaria de la tristeza y el resentimiento de ambas. La película aborda temas tan universales como la muerte y la amistad, enmarcados en la inconfundible sensibilidad del cine de Almodóvar.
Durante la presentación de la película, Almodóvar expresó su preocupación por los crecientes discursos de odio que se propagan tanto en España como en el resto del mundo. Según el director, su nuevo trabajo es una «respuesta a los discursos del odio que se oyen cada día». A pesar del panorama actual, Almodóvar se esfuerza por mantener una actitud positiva, recordando las palabras de la escritora Almudena Grandes, quien le dedicó uno de sus libros con la frase: «Pedro, la alegría es la mejor de las resistencias».
El director también aprovechó la rueda de prensa para criticar duramente a la ultraderecha española, que, en su opinión, busca convertir a los inmigrantes en «invasores». Almodóvar calificó esta postura como «delirante, profundamente estúpida e injusta», y propuso una respuesta basada en la apertura y el apoyo a quienes más lo necesitan, en un mundo cada vez más complejo y amenazado por peligros como el cambio climático.
En relación con el contenido de su película, Almodóvar abordó el tema de la eutanasia, un tema que ha tocado de manera directa en su vida debido a la enfermedad que ha limitado su movimiento. El cineasta expresó su convicción de que la regulación de la eutanasia es fundamental, destacando que España es uno de los pocos países europeos con una ley al respecto, pero subrayó la urgencia de que esta regulación se extienda a nivel mundial.
Tilda Swinton y Julianne Moore, por su parte, no escatimaron en elogios hacia Almodóvar. Ambas actrices se declararon «grandes admiradoras» del cineasta español. Moore compartió su asombro al descubrir que «todo es Pedro» en el set de rodaje, desde los colores hasta los objetos, y expresó su gratitud por haber sido parte de su universo cinematográfico. Swinton, por su parte, recordó cómo se sintió al ver por primera vez una película de Almodóvar, Mujeres al borde de un ataque de nervios, y confesó que nunca imaginó encontrar un lugar en el mundo del director, hasta que se ofreció a aprender español para él.