Este fenómeno ocurre cuando la Tierra cruza la estela de partículas dejadas por el cometa 21P/Giacobini-Zinner, ofreciendo un breve pero impresionante show astronómico, especialmente en el hemisferio norte.
¿Cuándo y cómo disfrutar de las Dracónidas en 2024?
Este año, la lluvia de estrellas Dracónidas podrá ser observada entre el 6 y el 10 de octubre, aunque el momento de mayor actividad se producirá el martes 8 de octubre, alrededor de las tres de la tarde (hora peninsular). Si bien la luz del día dificultará la observación en ese momento, se espera que en la madrugada del mismo día, cerca del amanecer, sea posible disfrutar de algunos picos secundarios de actividad.
Recomendaciones para ver las Dracónidas
Para disfrutar plenamente de esta lluvia de estrellas, lo ideal es buscar un lugar oscuro, alejado de fuentes de contaminación lumínica, con un horizonte despejado de obstáculos como edificios o árboles. No es necesario utilizar telescopios o prismáticos, ya que es preferible tener un amplio campo de visión para apreciar mejor el fenómeno.
En zonas situadas en latitudes alrededor de los 40º norte, como España, las condiciones son propicias para observar el espectáculo, ya que el radiante, el punto del que parecen surgir las estrellas fugaces, se mantiene por encima del horizonte durante toda la noche. Aunque el radiante está en la constelación de Draco, las estrellas fugaces pueden aparecer en cualquier zona del cielo. Para evitar el resplandor lunar, lo mejor es mirar en dirección contraria a la luna, aunque este año no será un gran impedimento, ya que el evento se produce cerca de la fase de cuarto creciente.
Un buen consejo es recostarse cómodamente en un lugar oscuro y permitir que la vista se ajuste a la oscuridad para maximizar la experiencia.
El origen de las Dracónidas
La lluvia de estrellas Dracónidas se origina en el cometa 21P/Giacobini-Zinner, descubierto en 1900, el cual completa una órbita alrededor del Sol cada poco más de seis años. A su paso, deja una estela de pequeños fragmentos que, al cruzar la atmósfera terrestre, se desintegran, creando los destellos característicos de las lluvias de meteoros.
A pesar de que los fragmentos son diminutos, más pequeños que granos de arena, la velocidad con la que entran en contacto con la atmósfera terrestre provoca que se desintegren rápidamente, emitiendo breves destellos que son visibles desde la Tierra.
¿Qué esperar de las Dracónidas este año?
Aunque las Dracónidas son conocidas por ser una lluvia de meteoros más modesta en comparación con las Perseidas, con una tasa promedio de 20 meteoros por hora, en ocasiones históricas han ofrecido espectáculos inolvidables. En 1933 y 1946, se llegaron a registrar miles de meteoros por hora, y en 2011, a pesar de las dificultades provocadas por la luz lunar, se observaron más de 600 meteoros en una hora.