Hemos podido ver a la Infanta Cristina salir de su domicilio de Ginebra, ciudad a la que se fue a vivir con toda su familia el pasado verano, y desde donde está viviendo de lejos los avatares de los últimos días en la Casa Real. Aún no está confirmado si finalmente la Duquesa de Palma -se descarta por completo a Iñaki Urdangarín- acudirá a las ceremonias de abdicación y proclamación del actual y el nuevo Rey respectivamente.
Aunque la fecha para el día en el que Felipe VI será proclamado Rey de España ya está elegida, será el 19 de junio, lo que aún no está confirmado es la asistencia de la Infanta Cristina a la proclamación y es que desde la reciente comunicación de que los miembros de la Familia Real se han reducido a los futuros Reyes, Felipe y Letizia y las infantas Leonor y Sofía, las representaciones oficiales por parte del resto de la familia se han ido reduciendo.
Lejos de todo esto vive la Infanta Cristina, que sale todos los días muy temprano de casa para irse a trabajar, aunque en esta ocasión no la hemos podido ver con la sonrisa a la que ya nos tiene acostumbrados, y es que a pesar de todo se esfuerza por mostrar su mejor cara a la prensa.
Seguramente la Infanta sabe que en la abdicación de su padre tras 40 años de reinado ha tenido bastante que ver la situación procesal en la que están inmersos ella y su marido.