La Infanta Pilar ha hecho sus primeras declaraciones después de que su nombre apareciera entre los conocidos como 'Papeles de Panamá' vinculada a la empresa Delantera financiera que mantuvo en activo durante 40 años.
Unos días antes había enviado un comunicado en el que admitía haber sido titular junto con su marido de una sociedad en Panamá abierta en 1974 y cerrada en 2014, tan sólo cinco días después de la proclamación de su sobrino Felipe VI como Rey. Al tiempo que aseguraba que la firma nunca tuvo ingresos «fuera del control de las autoridades fiscales» ni incumplió «ninguna obligación que exigiera la legislación tributaria española». Según afirmó en el citado comunicado, la empresa se disolvió al no contar con recursos suficientes ni expectativas que justificaran su mantenimiento y cualquier «otra interpretación es sencillamente errónea».
La hermana de Don Juan Carlos no se había dejado ver en los cinco días que habían transcurrido desde que su nombre saliera a relucir. Sin embargo, el pasado viernes Doña Pilar salió de casa para comprar unos perfumes y tomar un café, momento en el que fue abordada por la prensa, a la que aseguró que «el escándalo lo están montando ustedes», y que todo lo que tenía que decir al respecto de la polémica ya lo había explicado en el comunicado emitido: «Yo ya he dicho todo lo que tenía que decir».