La vida de Felipe Juan Froilán de Todos Los Santos es un misterio desde que se trasladó a Abu Dabi el pasado mes de febrero. El nieto del Rey emérito fue convencido por su madre, la infanta Elena, y su abuelo, don Juan Carlos, para asentarse en el país árabe y desarrollar allí sus proyectos laborales.
Ahora, se ha sabido, gracias a La Razón, que el chico está inmerso en la preparación de la próxima Cumbre del Clima de la ONU que se celebrará en Dubái este mes de diciembre.
De esta nueva vida de Froilán apenas conocemos que trabaja para la petrolera nacional, ADNOC, y que con su propio sueldo se paga un apartamento en uno de los edificios más lujosos de La Marina, en la capital de los Emiratos Árabes, Abu Dabi.
No se saben más detalles sobre el tipo de trabajo que desarrolla el nieto del emérito en la petrolera , y tanto su madre como su abuelo se han limitado a declarar en alguna ocasión que el chico «está muy contento» con lo que hace.
Froilán ha destacado en su nuevo trabajo por sus habilidades sociales
El hijo de la infanta Elena y Jaime de Marichalar se está labrando su propio futuro en Emiratos y parece que en su empresa han sabido valorar sus puntos fuertes.
El entorno de Froilán ha contado a La Razón que el chico se siente motivado y valorado en su nuevo puesto, y que sus habilidades interpersonales, así como su facilidad de adaptación de los cambios han sido claves para su éxito.
A su abuelo don Juan Carlos le debe su incorporación a la petrolera ADNOC, una de las mayores del mundo y cuyo directivo, el sultán Al Jaber, es uno de los encargados de supervisar las negociaciones climáticas en la próxima Cumbre del Clima, de la que será presidente.
Tiene gracia, pues precisamente las petroleras son una de las industrias más contaminantes del mundo. Es por eso que el nuevo jefe de Froilán quiere hacer un esfuerzo por convencer al mundo de que pueden reducir la huella ambiental generada por la explotación del carbón.
Sin duda, el muchacho tiene una tarea importante entre manos, y sus padres no pueden estar más satisfechos de ver cómo ha sentado la cabeza tras su marcha.
La tranquila vida social de Froilán en Abu Dabi y la buena relación con su abuelo
En Abu Dabi, Froilán está centrado en su trabajo, sin apenas tiempo para pensar en salir a divertirse. Algo muy diferente a lo que nos tenía acostumbrados en Madrid, donde era un habitual en la noche.
De hecho, se dice que las numerosas polémicas que ha protagonizado en el pasado el primogénito de la Infanta Elena tendrían mucho que ver con la decisión de apartar al joven de España y mandarlo lejos, con su abuelo, para empezar de cero.
Poco a poco, Froilán ha ido ampliando su círculo de amigos en Abu Dabi, todos pertenecientes a su entorno laboral, con los que disfruta de una vida muy tranquila, nada que ver con el ritmo que llevaba en España.
A su abuelo, el rey Juan Carlos, le visita frecuentemente. Ambos siempre han tenido una conexión muy especial, pues comparten sentido del humor y disfrutan de largas charlas, además de juntarse para ver el fútbol, la Fórmula 1 o el tenis, donde los deportistas españoles siempre tienen una importante presencia.
Froilán, sin fecha de regreso a España
Aunque en Abu Dabi tanto Froilán como su abuelo viven en un exilio de lujo donde no les falta de nada, lo cierto es que el nieto del emérito tenía la idea de celebrar su cumpleaños este verano en Marbella o Ibiza, junto a sus amigos de siempre.
Pero, sus compromisos laborales suponen un problema para que pueda viajar a España a corto plazo, por lo que lo más probable es que no pise territorio nacional casi hasta la próxima Navidad, cuando haya finalizado la Cumbre del Clima en la que tanto esmero está poniendo.
En cuanto al emérito, parece que el adelanto electoral y el mal tiempo le han disuadido de regresar a nuestro país, al menos, de momento.