Carlos Seguí acudió un fin de semana más a recoger a su hijo Lucas a casa de su exmujer, Patricia Conde, demostrando ser un padrazo con el pequeño Lucas, de un año de edad. A la espera de verse las caras en los juzgados de Palma de Mallorca, donde hace escasos días se ha sabido que tendrá lugar el juicio por la custodia de su hijo, Carlos Seguí ha viajado a Madrid para disfrutar junto a su hijo de su correspondiente fin de semana.
El mallorquín corrió al encuentro del pequeño, en brazos de una de las empleadas del hogar, gritando «Hola cariño mío» y rodeándole de arrumacos. A su llegada, Carlos Seguí aseguró que le ha parecido «asqueroso y repugnante» el comentario que su ex hizo en su blog el día de la madre: «A todas las mamás que tienen que sufrir que cada 10-15 días les arranquen a sus bebés de los brazos para que hagan miles de kilómetros porque alguien decidió favorecer a un adulto muy por encima de los derechos, del bienestar y la salud de un bebé».
El empresario ha estallado y ha asegurado: «Ella misma se define con sus palabras«. Carlos se muestra cansado de las mismas disputas con la madre de su hijo y ha sido muy tajante: «Se cree que el hijo es suyo y que no tiene padre». Seguí ha declarado que la cosa se va normalizando «poco a poco» y ha mencionado que esta vez no ha tenido problemas para recoger a su hijo: «No, por ahora no».
Mientras facturaba en el aeropuerto, Carlos se ha deshecho en cariños y besos hacia su hijo, ha mostrado su faceta más paternal y se le ha podido ver completamente emocionado, orgulloso y atento a Lucas.