María Teresa Campos se ha ido de cena junto con un buen amigo, un hombre que estamos seguros que la habrá hecho reir. La conocida presentadora decidió salir a cenar con el humorista Bigote Arrocet, muy conocido en España sobre todo en los años 80 y 90 por su colaboración durante muchos años en Un, dos, tres, el programa que marcó un hito en la televisión en España en aquellos años.
Bigote Arrocet mantiene su buen humor, lo que le convierte en el mejor compañero para ir a cenar
Arrocet aún conserva la envidiable cabellera y el bigote con los que se dio a conocer y suponemos también que el buen humor, lo que le convierte en el mejor compañero para salir de cena.
Así pudimos ver la presentadora y el humorista acudir a un conocido restaurante a las afueras de Madrid donde disfrutaron de una estupenda velada compartiendo risas y confidencias. Finalizada la cena ambos abandonaron el establecimiento disfrutando de un tranquilo paseo hasta el vehículo.
A pesar de que hace ya años que cumplió los 65 años, María Teresa Campos no piensa en la retirada. Es una de las grandes profesionales del mundo de la comunicación y goza de un gran prestigio, ya que ha marcado escuela dentro del mundo de la televisión, aunque sus comienzos tuvieron lugar en la radio, en su Málaga natal.
Después de trabajar en varias cadenas de televisión, en los últimos años trabaja para Telecinco, cadena en la que ha presentado varios programas y en diferentes formatos, pero en la actualidad se mantiene al frente del programa Qué tiempo tan feliz que compagina con sus colaboradores semanales en el programa de la misma cadena Sálvame.
En los últimos años no se ha sabido nada de su vida personal
La conocida presentadora siempre ha intentado mantener su vida privada al margen de los medios. Sin embargo a lo largo de su andadura profesional se le han conocido varias parejas aunque en los últimos años nada se ha sabido de su vida personal.
María Teresa Campos, viuda de José María Borrego, mantuvo una relación sentimental con Félix Arechavaleta desde 1986. Aunque todo parecía indicar que formaban una de las parejas más consolidadas del panorama social, tras haber conseguido superar una crisis doce años después, ambos decidieron poner fin a su relación, emprendiendo caminos separados. Poco después se dejaba ver en compañía de un buen amigo, Felipe Maestro, ex compañero sentimental de Rosa Villacastín. Más tarde llegaría a su vida Santiago García Ruiz, con quien rompería después de casi un año de relación. Al año siguiente comenzó una relación con un abogado argentino llamado Alberto, que le devolvía de nuevo la sonrisa. Sin embargo su historia de amor tampoco llegó a buen puerto.
El último romance que le conoce fue el que vivió junto a Gustavo Manilow, allá por 2009, quien estaba muy integrado en su familia, con la que compartió celebraciones y vacaciones. Pero la historia tampoco funcionó.