El estado de salud de Isabel Pantoja está en un punto muy delicado. Como desvela Pilar Vidal en El Mundo, la cantante «sufre una nefropatía diabética provocada por sus altos niveles de glucemia en sangre». Una enfermedad por la que está siendo tratada en el Hospital Infanta Luisa de Sevilla y por la que ha recibido un permiso extraordinario de siete días.
Una situación grave y complicada en la que no le falta el apoyo de su hermano Agustín y su sobrina Anabel. Por el rostro de esta última podíamos ver que el estado de la tonadillera era grave, ninguna estratagema para intentar salvar su regreso a Alcalá de Guadaíra sino una dolencia que de no ser tratada podría llevar a la necesidad de diálisis o incluso el trasplante de riñón.
«La nefropatía es una afección de la diabetes que aparece cuando no se han controlado bien los niveles de azúcar y por tanto comienza a dañar al órgano. Si no se estabiliza y controla puede conllevar la necesidad de diálisis o incluso en algunos casos de un trasplante de riñón», explican fuentes médicas a LOC.