Por fin Olvido Hormigos no protagoniza una portada en la que se dedica a poner verde a la que hasta el momento ha sido su archienemiga número uno, Belén Esteban. La exconcejala de Los Yébenes aparece en la primera plana de la revista Lecturas presentando a sus tres hijos, a la par que admite que, aunque dijo que Esteban le parecía mala persona, ahora no lo piensa: “Veo que es una mujer muy de verdad, guste o no, dice lo que siente».
La exconcursante de Gran Hermano VIP asegura que encontró a la de San Blas muy decaída con el intento de suicidio del que fuera su representante, Toño Sanchís, así que decidió enterrar el hacha de guerra: «La vi mal y me acerque a ella». Un hecho sorprendente dada su anterior relación, que se tensaba dentro del reality de Telecinco, cuando después de dedicarse frases como “Tómate otra copa de vino, que es lo que se te da bien” (Belén a Hormigos en referencia a los problemas con el alcohol de esta última) o “Y tú tómate otra cosita”, acabaron por insultarse de manera directa en distintos platós de televisión.
Quiere a su marido, pero “sin sexo”
Olvidos, casada con Jesús Atahonero, ha protagonizado varios escándalos sexuales, en los que se ha demostrado que le ha sido infiel a su marido. Por esta causa, la pareja comenzó a desestabilizarse, hasta que llegaron a plantearse el divorcio: “Mi hijo Mario lloraba diciendo que no quería que nos divorciáramos”, asegura.
Por mantener unida a la familia y porque, según declara, quiere mucho a Jesús, han permanecido juntos, aunque sin mantener relaciones sexuales: “no siento atracción por él”. Pese a todo, asegura: «Yo estoy muy a gusto como estoy. Quiero que vivamos juntos y no me obliga nadie. Soy feliz así, nos queremos», explica la colaboradora de Gran Hermano VIP.
«Sabe que no quiero. Alguna vez que me dice algo o me coge, yo me escabullo». No le niega, sin embargo, todo el cariño: «Un abrazo claro que sí, pero más, no. No quiero darle falsas esperanzas». Una relación en la que lo carnal está totalmente descartado, pese a que Jesús sigue intentándolo de tanto en tanto: «Hay ratos que me necesita de otra manera, como pareja, y a lo mejor se mosquea un pelín, pero sí, creo que es feliz. Lo único que no tenemos es sexo y eso se puede solucionar de otras maneras».
Además de contar las intimidades con su pareja, reconoce que personajes famosos han contactado con ella para tener un idilio fuera de pantalla: «Me ha escrito gente muy conocida para quedar conmigo con la condición de que no nos viera nadie». El nombre, eso sí, no lo confiesa: «Nunca lo contaré, no soy así. Es un personaje muy famoso de Telecinco, con pareja».
Tres hijos en la familia
Feliz y relajada, la de Los Yébenes ha mostrado en público por primera vez la cara de sus retoños, de los cuales está muy orgullosa: “Presumo de mis hijos, son mi vida”.
Su hijo mayor, Mario, está en plena adolescencia. Tiene 16 años y está en primero de bachillerato, y aunque cuenta que ha bajado un poco las notas, asegura que ya ha hablado con él y que está tranquila: “Es muy deportista y ya conozco a su primera amiguita. Tenemos mucha afinidad, es tan cabezón y sociable como yo”.
Del mediano, Javier, asegura que es un santo, muy maduro y que se preocupa por todos: “Quizá le haya influido todo lo que hemos pasado. No se le nota nada la adolescencia, es tranquilo y buenísimo”.
Valeria, que va a cumplir 18 meses, es la princesa de la casa. Olvido asegura que les ha cambiado la vida y que es un regalo que le ha hecho Dios: “La niña ha puesto tranquilidad y mucha calma entre todos. Es una gran alegría, nos tiene locos”.