Los jugadores de 'la Roja' han permanecido casi un mes en Francia, hasta que el pasado lunes la Selección era eliminada por Italia, con un 2-0 que trajo consigo la vuelta a casa del equipo patrio. Ahora todos los jugadores han regresado a sus hogares para reencontrarse con sus familias y disfrutar de las vacaciones.
Iker Casillas es uno de los que peor ha llevado el distanciamiento con su familia, porque, aunque otros como Sergio Ramos recibían la visita de Pilar Rubio y sus pequeños, el guardamenta sufría la ausencia de su mujer y sus hijos por el reciente nacimiento del bebé, Lucas, que aún es demasiado pequeño para viajar.
Ha sido la propia Sara Carbonero quien ha publicado una bonita estampa, donde se ve al recién nacido acurrucado sobre los brazos de su papá. La única mención que ha hecho es un trébol de cuatro hojas, cuyo significado es la suerte. La suerte de estar, al fin, los cuatro reunidos en su domicilio madrileño.
Antes de la llegada de Lucas, fue la presentadora la encargada de anunciar que este verano lo iban a aprovechar para disfrutar en España (durante el resto del año residen en Oporto, ciudad donde juega Casillas) con la familia y los amigos. “Cuando vives fuera lo único que quieres es volver a casa”, sentenció. Por lo tanto, su nueva casa en Corral de Almaguer (Toledo), donde se encuentran los orígenes de Sara, y Navalacruz (Ávila), pueblo del futbolista, serán los destinos elegidos por la pareja para pasar su descanso estival.
Ana P. Cabrero