Belén Esteban acaba de cumplir 43 años, una cifra que ha querido celebrar con una gran fiesta en la que la presencia de hombres estaba completamente vetada, incluso la de su novio Miguel. La colaboradora quiso pasar una divertida 'noche de chicas' al lado de sus amigas y compañeras, con las que compartió una velada de lo más completa.
La de San Blas se llevó a su grupo al museo Chicote, donde compartieron local con otros clientes porque no lo cerró en exclusiva para su 'single party'. La quedada comenzó a las 10 de la noche, cuando comenzaron a llegar algunas de sus compañeras de 'Sálvame' e incluso del equipo de 'Ana Rosa', programa en el que la 'princesa del pueblo' trabajó durante muchos años. Además no podían faltar sus amigas de toda la vida, entre las que destaca Mariví, encargada de defender a Esteban cuando ésta fue concursante de 'Gran Hermano VIP'. También acudieron su grupo de amigas de Paracuellos, pueblo al que se trasladó a vivir después de dejar su barrio de toda la vida.
En Chicote Belén sopló las velas de una emotiva tarta obra de Jessica Déniz, una excompañera de 'AR' que decidió montar su propia empresa de pastelería. En el dulce destacaban algunas fotografías que representaban momentos clave en la vida de la colaboradora, compartidos con sus padres, si hija Andrea y su novio Miguel. Previamente todas disfrutaron de un completo catering por cortesía de Esteban, que tomaron antes de abandonar el lugar y trasladarse a otro más propicio en el que mover el esqueleto.
Las chicas se fueron a la discoteca Kapital, donde lo pasaron genial en un reservado, tal y como ha puesto de manifiesto la protagonista de la noche en su cuenta de Instagram. La televisiva recibió regalos de todo tipo como unos pendientes, un bolso de Chanel, una cartera de Dior, productos de belleza de la línea PBSerum de su amiga Mariví, una chaqueta, pañuelos, zapatos y muchas cosas más. Pero lo más importante es que pudo vivir esta bonita experiencia al lado de su gente más querida.
Ana P. Cabrero