Julián Contreras metió la pata con sus hermanos en noviembre de 2015, cuando después de la boda de Cayetano con Eva González fue a un plató de televisión a asegurar que él y su padre se habían sentido aislados durante el enlace: «Abandonamos el convite en silencio y con las lágrimas en los ojos». Unas palabras que sentaron como un jarro de agua fría al recién casado y a Francisco Rivera, el mayor de los tres, que se sintieron realmente ofendidos con sus comentarios.
«No sé cómo no le da vergüenza de decir las cosas que han dicho», comentó Fran de manera pública. Desde ese momento la relación murió entre los hermanos Ordóñez, hasta tal punto de no haber tenido ningún tipo de comunicación desde la feca del enlace entre el torero y la modelo.
Pero ahora parece que Julián ha reculado y busca tener un acercamiento con ellos: «Con la despedida de Fran he sentido una sensación agridulce. Tengo pena porque son mis hermanos. No se me ha pasado por la cabeza llamar a Fran porque entiendo que si pide que respeten su decisión, tengo que respetar la decisión de los demás. Creo que he tenido muchos errores. Yo por mis circunstancias me aislé. Quiero volver a tener una relación con Fran y Cayetano, no quiero vivir en la mentira y decir que hay buena relación porque no es así», aseguró en el programa 'Socialité'.
Además, Cayetano ha anunciado recientemente que pronto se convertirá en padre junto a su mujer, Eva González. Este sería otro motivo para que, el futuro tío, haya decidido enterrar el hacha de guerra y volver a formar parte de su familia materna, con la que le unían muchos lazos antes de que todo se fuera al traste por una desafortunada entrevista.
Ana P. Cabrero