La salud del líder de Ketama, Antonio Carmona, sigue siendo inestable. El cantante continúa ingresado en el Hospital San Francisco de Asís por una grave infección de garganta, y aunque al principio se pensó que estaba en coma, su mujer, Mariola Orellana, ha querido explicar la situación real en la que se encuentra el artista: «Antonio está bien, está sedado, no está en coma», ha asegurado.
Además se especuló con que todo había sido producto de unos implantes vucales mal colocados, algo que Mariola también ha desmentido: «No es por ningún implante, él tiene unos implantes muy bien colocados, no tiene nada que ver. Tiene una inflamación en las vías respiratorias y está en estos momentos en muy buenas manos y están ocupándose de que todo salga bien. Agradezco a todos vuestro interés y nada y que pronto se recupere».
Las perspectivas de que la cosa vaya a mejor parecen ser muy factibles: «Los médicos irán diciéndome cosas todo el rato y ahora mismo estamos esperando solamente a que le baje la inflamación que tiene y estamos muy positivos y muy confiados en que no va a pasarle nada». Ante las preguntas de los periodistas, ha vuelto a especificar que no se trata de un coma: «En coma inducido no está. Tiene una sedación inducida para que las vías respiratorias puedan desinflamarse».
Algunos de sus amigos se han enterado de la noticia al verla publicada en los medios de comunicación, por lo que su alarma ha sido mayúscula. Así ha sucedido con el chef Floren Domezain, que hace tan solo dos días compartía mesa y mantel con Antonio Carmona, como así dejó ver en su perfil de Instagram. Su cita fue con motivo de la reciente nominación a los Premios Grammy del flamenco y nada hacía pensar que en tan solo unas horas se encontraría en este estado.
Ana P. Cabrero