La socialité Tamara Falcó se ha quedado, literalmente, sin vestido a tan solo poco más de un mes para su boda. La firma con la que iba a trabajar, Sophie et Voilà, publicaba a través de redes sociales un comunicado explicando que se ha roto el acuerdo entre Falcó y el equipo que estaba diseñando y creando su vestido de novia. Una noticia que la propia Tamara ha conocido a partir de los medios y que le ha pillado totalmente desprevenida.
Después de una pedida de mano por todo lo alto y que dio mucho que hablar, la Marquesa de Griñón tiene que empezar su búsqueda de traje desde cero. Así se lo ha comentado a la revista ¡HOLA!, asegurando su completa sorpresa por la ruptura del acuerdo manteniendo que no esperaba que llegarían hasta este punto. «Tengo que empezar todo desde cero. Me da mucha pena porque lo que tenía que ser un momento super especial e ilusionante de elegir el vestido y probármelo se había convertido en un conflicto lleno de momentos de tensión. Se había desvirtuado totalmente el proceso… pero, aún así, no pensé que fuéramos a llegar hasta aquí», ha dicho la hija de Isabel Preysler.
Su enlace con Íñigo Onieva ahora pasa por un nuevo problema que tendrá que resolver en pocos días. Son muchos los diseñadores que ahora están a la espera de ser los elegidos ofreciéndose para ser ellos quién estén detrás del vestido a Tamara Falcó, aunque entre las papeletas más comentadas está la de su íntimo amigo y diseñador Juan Avellaneda. No obstante, el verdadero motivo de que la firma bilbaína se haya desvinculado de seguir adelante con el proceso del vestido de novia de Falcó, se ha conocido a través del mencionado comunicado.
El verdadero motivo por el que Sophie et Voilà ha roto con Tamara Falcó
El comunicado publicado este martes por parte de Sophie et Voilà en sus redes sociales, anunciaba que «el acuerdo para la confección de su vestido de novia ha tenido que ser resuelto como consecuencia del incumplimiento contractual por parte de la señora Falcó«. Aunque no han entrado en detalles más profundos, la firma ha dejado caer que al parecer Tamara Falcó tenía en mente copiar un diseño de una alta firma. Así, Sophie et Voilà explicaban que admiten sentir «un profundo respeto» por la creación artística de otros compañeros y su ética les «impide traspasar ciertos límites», sobre todo cuando peligra «la autoría original del diseño».
También han expresado que a pesar de que tenían todas las ganas del mundo de que fuera «la novia más guapa del mundo» poniendo su empeño en «capturar la esencia sobre los conceptos e inspiraciones» que traía en mente, lamentablemente «por el respeto que nos merece la originalidad de los trabajos de otras marcas de alta costura, no podemos cumplir con determinadas exigencias de la señora Falcó, que desde el inicio de la relación hemos desaconsejado y negado a realizar por acercarse demasiado a diseños ajenos a nuestra firma».
Finalmente, Sophie et Voilà ha mandado sus mejores deseos a Tamara Falcó para su gran día y sobre todo por encontrar un vestido a la altura, algo que ha agradecido Tamara Falcó pero que aún así, dice que la han dejado «compuesta y sin vestido». De hecho, ha negado que quisiera copiar el diseño de otro diseñador y se ha defendido alegando que «¿Cómo voy a pedir que hagan algo así? Si yo soy la primera que me dedico a la moda. Tengo un respeto máximo a los diseñadores y a todos los trabajos relacionados con la profesión».
Así iba a ser el vestido de novia de Tamara Falcó por parte Sophie et Voilà
A pesar de que al comienzo de todo el proceso de la creación del vestido de novia de Tamara Falcó, tanto la socialité como la firma bilbaína se sentían felices y emocionadas, finalmente no lucirá el diseño que estaban creando. Tamara Falcó tenía claro desde el principio que quería lucir en su gran día un diseño de una firma o marca española, y confiaba plenamente en Sophie et Voilà. La expectación en su vestido de novia lleva meses despertando el interés mediático y de sus seguidores, ya que la propia Tamara afirmó que era un estilo alejado de lo que se podía esperar pero que para ella era precioso.
Desde ‘El Programa de Ana Rosa’ han adelantado de que el modelo en el que ella quería inspirarse era un vestido de Chanel expuesto en el Metropolitan de Nueva York. Un diseño francés que había comprometido a la firma española y razón por la cual finalmente no ha tenido cabida. Por su parte el periódico El Mundo ha afirmado que «ella tenía una inspiración en un vestido de 2010. Los puntos de vista eran diferentes, pero siempre trabajaron con la ambición de llegar a un acuerdo».