Antonio Banderas atraviesa un momento difícil, ya que su querida propiedad en Marbella, conocida como ‘La Gaviota’, ha sido derruida por no cumplir con la normativa vigente. Esta vivienda fue construida en 1995 por el promotor Jesús Gil como agradecimiento a la locutora Encarna Sánchez, quien había apoyado a Gil en su programa de radio de COPE durante las elecciones de 1991 y 1995. Poco antes de fallecer en 1996, Sánchez vendió la propiedad a Banderas.
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En 1996, algunos vecinos de la urbanización ‘Los Monteros’, donde estaba ubicada la casa, denunciaron la construcción alegando que ocupaba terreno público destinado a parques y jardines. En 2003, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía anuló la licencia por considerarla ilegal debido a la invasión de la zona de dominio público marítimo terrestre. Aunque el plan general de ordenación urbana de 2010 legalizó temporalmente la vivienda, este plan fue posteriormente suspendido, y la casa volvió a ser catalogada como ilegal.
En 2014, el Supremo legalizó 6.500 casas, incluyendo ‘La Gaviota’, con la condición de ceder 1.243 metros cuadrados de la parte lateral para la instalación de una depuradora. Sin embargo, este acuerdo no fue suficiente para mantener la vivienda, que finalmente ha sido convertida en un solar.
Antonio Banderas ha expresado en varias ocasiones el cariño que sentía por esta casa, llena de recuerdos. En ‘La Gaviota’ vio crecer a su hija Stella del Carmen y vivió momentos felices durante su matrimonio con Melanie Griffith hasta su divorcio en 2014. Además, fue el lugar donde pasó la pandemia en 2020.
Un auténtico solar
Desafortunadamente para el malagueño, la vivienda ha sido derruida. En 2014, Banderas defendió la legalidad de la propiedad, declarando: «No he cometido ninguna ilegalidad. Compré la casa a un tercero con todos los papeles en regla y si me engañó el Ayuntamiento, yo no tengo ninguna culpa».
Esta demolición pone fin a una larga saga legal y emocional para Banderas, quien siempre mantuvo que había adquirido la casa de manera legítima y con toda la documentación en orden. ‘La Gaviota’ ya no existe.