Se trata de una verdadera pandemia: La ansiedad. Un mal moderno que afecta cada vez a más jóvenes. Y ahora le ha tocado a Laura Escanes.
La influencer anunciaba este jueves que había llegado a su límite después de muchas semanas soportando un alto nivel de estrés y tensión. «La ansiedad y el pánico no se eligen», escribió la catalana.
Escanes, de 26 años, tuvo que cancelar a última hora su asistencia a un evento importante tras sufrir una crisis de ansiedad. Este incidente le hizo darse cuenta de que ha llegado la hora de reordenar sus prioridades y darle importancia a su salud mental.
Era la primera vez que la ex de Risto Mejide cancelaba un trabajo con menos de 24 horas de antelación. Pero, como ella misma ha contado, se ha visto sometida a una racha de muchísimo estrés (quizás, propiciada por su separación, un cambio de casa con una niña pequeña, ser juzgada por su nueva relación con Álvaro de Luna y un largo etcétera).
La influencer se ha disculpado porque, según dice, es muy profesional y valora el esfuerzo que hay detrás de cualquier organización, pero esta vez llevaba más de dos días con mucha ansiedad y la gota que colmó el vaso fue un ataque de pánico. Ahí fue cuando Laura se dio cuenta de que tenía que parar.
La ansiedad, una vieja amiga de Laura Escanes
A pesar de la repercusión mediática que ha tenido el anuncio de Laura Escanes, esta no es la primera vez que la catalana sufre episodios de ansiedad.
Hace ya dos años decidió tomarse un descanso de las redes sociales tras pasar por un momento especialmente estresante. Ahora, en su comunicado, la influencer ha advertido de que nadie se sorprenda si sigue publicando, pues, viendo venir lo que finalmente ha sucedido, ha tenido tiempo de organizarse para dejar algunas campañas ya grabadas y programadas. Al fin y al cabo, las redes son su medio de vida, su profesión, y se debe a ellas.
Pero esto no es todo. La ansiedad acompaña a Laura Escanes desde bien jovencita. Mucho antes, incluso, de saltar a la fama. Hace unos años reveló en una entrevista que había sufrido muchos ataques de ansiedad cuando iba a la Universidad o cuando salía de fiesta. Pero lo peor es que esas crisis podían darse en cualquier momento, y eran tan intensas que a veces llegaba incluso a perder el conocimiento.
Los familiares y amigos y la psicóloga de Laura Escanes le han aconsejado parar
Lo cierto es que Laura Escanes llevaba toda la semana bastante ausente de sus redes sociales, algo que había llamado la atención de algunos de sus seguidores, acostumbrados a verla casi a diario.
La razón de su desaparición no era otra que la ansiedad que estaba sufriendo por no llegar a todo y fruto de toda la tensión acumulada en los últimos meses.
Al parecer, el entorno de la influencer: amigos, familiares e incluso su psicóloga, le habrían advertido de que tenía que echar el freno tarde o temprano. No obstante, tomar la decisión de paralizar su agenda profesional de la noche a la mañana ha sido una decisión muy dura para ella. «La culpa y la presión siguen dentro de mí por no poder dar lo que se espera de mí incluso en mis peores momentos», ha contado.
Este mismo viernes, Laura Escanes se quejaba a través de sus redes sociales de la persecución mediática que estaba sufriendo tras anunciar que iba a paralizar sus compromisos laborales. Ella ha asegurado que en su vida ahora mismo no hay nada interesante que contar y que tiene un día a día como el de cualquier persona: Llevando a su hija al colegio, acudiendo al médico o comiendo con amigas.