Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), el detenido se ha acogido a su derecho a no declarar.
En principio, el hombre está investigado por la presunta comisión de los delitos de atentado a agente de la autoridad, detención ilegal por haber retenido a alguna persona durante la persecución policial que llevó a su detención, y contra la seguridad del tráfico.
Las mismas fuentes han precisado que no se descarta que, a lo largo de la fase de instrucción, puedan añadirse a esta lista otros posibles delitos.
El atropello se produjo sobre las 12:50 horas del pasado viernes en la carretera GR-34 de Granada, en el cruce denominado «La Colorá» donde en ese momento estaban montando un control de carretera.
Aunque el detenido se perdió inicialmente por las calles del barrio de Almanjáyar, en la zona Norte de Granada, un amplio dispositivo en el que participaron agentes de la Policía Nacional y Local y la Guardia Civil logró su arresto ese mismo día.
Desde entonces, el arrestado ha permanecido en dependencias policiales pendiente de entrar en prisión, ya que además de los cargos que se le imputan por el suceso del viernes tenía en vigor una requisitoria para entrar a la cárcel en cumplimiento de una condena previa.
El guardia civil atropellado, un agente de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia, fue evacuado al hospital de Traumatología de Granada con pronóstico reservado, aunque ya ha recibido el alta médica.
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