Según han informado este lunes fuentes fiscales, la documentación está siendo traducida y se remitirá a la Fiscalía del Tribunal Supremo, que recientemente asumió la investigación que dirigía Anticorrupción sobre el presunto cobro de comisiones para la adjudicación en 2011 del AVE a La Meca (Arabia Saudí) al comprobar que podría estar involucrado el rey emérito.
A principios de este año, la Fiscalía Anticorrupción, estando aún al frente de esta investigación, envió una comisión rogatoria a Suiza para acceder a todos los datos sobre esa donación y la transferencia de 65 millones de euros que se hizo desde la fundación panameña Lucum, vinculada a Juan Carlos I, a una cuenta de su amiga Corinna Larsen.
Meses antes, la Fiscalía suiza pidió a su vez a la Audiencia Nacional los audios del encuentro que mantuvieron en Londres en 2015 el excomisario José Villarejo y la que fuera amiga del rey emérito para incorporarlos a la investigación que tiene abierta a los gestores de cuentas del rey emérito, Arturo Fasana y el abogado Dante Canónica.
El fiscal de Ginebra Yves Bertossa, que investiga esos hechos, encontró evidencias del movimiento de 100 millones de dólares por parte de Canónica y Arturo Fasana -que fue investigado en España por gestionar las cuentas que tenía en Suiza el líder de Gürtel Francisco Correa-.
En ese marco, el fiscal tomó declaración a ambos y a Corinna Larsen, y, al trascender las informaciones de la Tribuna de Ginebra sobre los 65 millones que se transfirieron a su cuenta, sus abogados emitieron un comunicado en el que explicaban que en 2012 su cliente recibió un regalo «no solicitado» del rey emérito, «quien lo describió como una forma de donación para ella y su hijo, con los cuales él se había encariñado».
En cuanto al acuerdo para la adjudicación del AVE a La Meca, los abogados aseguraron que Corinna no participó en ello y que, en ningún caso, ese hecho «tiene conexión con estos fondos. Una mirada rudimentaria a la cronología del origen de los fondos muestra esto claramente», concluían.
El inicio de la investigación de este asunto se remonta a julio de 2018 tras conocerse la grabación de las conversaciones entre Villarejo y Corinna Larsen, en las que ésta habría desvelado que el anterior jefe del Estado tenía cuentas en Suiza donde habría cobrado comisiones del AVE a La Meca y que la utilizó a ella como testaferro.
Las informaciones sobre fundaciones opacas que habrían servido para recibir esas comisiones provocaron que la Casa Real hiciera público un comunicado el pasado 15 de marzo en el que Felipe VI renunciaba a la herencia de su padre y anunciaba la retirada de la asignación presupuestaria que recibía don Juan Carlos.
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