En la operación, los agentes detuvieron a dos hombres, uno de origen albanés y otro español, como presuntos autores de delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a grupo criminal, y decomisaron 4.000 plantas de marihuana, 150 gramos de polen de la misma sustancia y 8 kilos de marihuana picada, con un alto valor en el mercado ilegal
En un comunicado, el cuerpo de policía ha explicado este miércoles que las investigaciones se iniciaron a principios del mes de marzo, cuando tuvieron conocimiento de que una organización criminal internacional podía estar operando en el Baix Llobregat desde principios de 2019.
Finalmente, los agentes localizaron una nave industrial donde se llevaban a cabo las labores de cultivo, secado, corte, embolsamiento y distribución de la droga.
Tras el registro policial de la nave, contando con la colaboración de la Policía Local de Vallirana, se aprehendieron 4.000 plantas de marihuana, 150 gramos de polen, 8 kilos de marihuana picada, teléfonos móviles y otros efectos incriminatorios.
Para intentar eludir la localización de la nave por parte de la policía, la organización realizaba un uso fraudulento de la red eléctrica, con un complejo entramado de iluminación, calefacción y secado, que podría superar los 300.000 euros a la compañía eléctrica.
Ante todas las evidencias, se detuvo a los dos hombres, que pasaron a disposición del juzgado de instrucción de guardia de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona), acusados de los presuntos delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a grupo criminal.
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