El acusado, que ha ingresado en prisión, llegó a España junto a las cuatro jóvenes, dos de ellas menores de edad, en marzo de 2020 tras un periplo que les llevó a varios países, y ha sido arrestado tras más de un año de investigación policial.
Según la Policía, las investigaciones comenzaron en septiembre del año pasado cuando el coordinador de una ONG de Cartagena que acoge y da protección internacional a personas en situación de vulnerabilidad o exclusión, interpuso una denuncia alertando de que cuatro mujeres de una familia vivían en plena sumisión hacia el varón.
Las gestiones realizadas por los agentes permitieron conocer que en marzo de 2020, un hombre y cuatro mujeres de origen yemení, entre ellas su hija menor de edad y una sobrina también menor, habían llegado a España a través el aeropuerto de Barajas y se encontraban acogidos en la Región de Murcia.
Dada la escasa colaboración del detenido, la Policía desconoce si viajó con el consentimiento de la madre de sus hijas o incluso si es real el parentesco, por lo que no se descarta que tengan que ser sometidas a pruebas de ADN.
Según las fuentes, cuando fue interrogado tras su detención el hombre dio diferentes versiones sobre el paradero de la madre de sus hijas y de los padres de sus sobrinas.
Las cuatro jóvenes solo interactuaban con otras mujeres de la ONG, y siempre en presencia del detenido, presentaban síntomas de malnutrición y extrema delgadez, y habían sido aisladas por completo, incluso sin televisión ni radio, alegando que no necesitaban contacto con el exterior.
Tras salir de Yemen en 2014, el hombre y las jóvenes viajaron a Malasia, Corea del Sur -donde estuvieron 15 días-, Indonesia -alrededor de un año-; Ecuador -cuatro meses-; Colombia -dos años-; y Turquía, desde donde partieron a España al tener noticias a través del consulado de Yemen de que tenía una denuncia por secuestro de sus dos sobrinas.
Los agentes, a través de Interpol, confirmaron que la madre de las dos sobrinas, que es además la mujer del hermano del investigado, seguía buscando a sus hijas.
A través de la Agregaduría de Interior en la Embajada de España en Arabia Saudí, pudo ser localizada la madre, manifestando por videoconferencia que su cuñado se llevó a sus hijas en 2014 y que no sabía nada de ellas desde hacía ocho años.
También afirmó que desconocía de dónde obtenía su cuñado los medios económicos para sobrevivir.
Dada la gravedad de los hechos constatados, se solicitó mandamiento de entrada y registro al Juzgado de Cartagena, que ordenó su ingreso en prisión y la asistencia a las cuatro víctimas que se encontraban en el interior del domicilio.
En el registro efectuado se le intervinieron cerca de 5.000 euros en efectivo y aproximadamente 2.500 dólares americanos. EFE
A.M.