El instituto armado ha dado cuenta en un comunicado del arresto de Pinocho o el Ganadero, avanzado ayer en Colombia por el ministro de Defensa de ese país, Diego Molano, después de que el juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea lo haya enviado a prisión incondicional.
Castillo Carrillo, de 41 años de edad, está considerado como líder de la banda criminal Los Pachenca, y las autoridades colombianas habían pedido su detención y entrega por un delito de homicidio y pertenencia a organización criminal.
Fuentes de la investigación han precisado a Efe que Pinocho hacía vida normal en esa localidad madrileña en una casa comprada por su mujer hace seis meses, donde residían con sus dos hijas, matriculadas en la universidad. Ni el detenido ni su esposa trabajaban, según la misma fuente.
La investigación en España ha sido corrido a cargo del Equipo de Huidos de la Justicia de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), que ha contado con la colaboración de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijin) de la Policía Nacional de Colombia y de la Drug Enforcement Administration (DEA) estadounidense.
Desde octubre, según la Guardia Civil, los investigadores han conseguido localizar a varios familiares y allegados del ahora detenido, sometiendo a varios de ellos y de su entorno más directo a continuos seguimientos y vigilancias discretas, hasta que finalmente se pudo confirmar la presencia de Pinocho en Brunete.
El detenido lideraba presuntamente el grupo criminal tras varias detenciones de otros históricos cabecillas del mismo, y las autoridades colombianas le atribuyen más de 18 años de trayectoria delictiva, con fuertes vínculos con otros grupos criminales como Los Mellizos y el Frente Resistencia Tayrona.
Se considera que ha coordinado la actividad narcotraficante de Los Pachenca bajo el mando de Hernán Giraldo, alias el Patrón de la Sierra, considerado por las mismas autoridades el responsable de varios casos de abusos sexuales a menores en Colombia.
En el año 2008, Castillo Carrillo fue extraditado a Estados Unidos, donde cumplió una condena de cuatro años por narcotráfico. Tras regresar a su país natal, mantuvo una vida aparentemente normal, hasta que tuvo conocimiento de que las autoridades colombianas tenían intención de acusarlo formalmente y, bajo el pretexto de haber recibido amenazas contra su vida, abandonó el país refugiándose finalmente en España.
El grupo criminal Los Pachencas tiene su origen en las Autodefensas Unidas de Colombia, al igual que otros grupos criminales como el conocido Clan del Golfo, todos ellos con el objetivo común de controlar el narcotráfico en distintas zonas de Colombia, de lo que ha derivado una pugna entre los dos clanes mencionados.
Además, Los Pachencas se nutren económicamente de la extorsión a comerciantes y habitantes de determinadas zonas turísticas con ingresos permanentes, así como de la venta de tierras, obligando a sus propietarios a venderlas y cobrando comisiones por ello.
Precisamente, Pinocho está acusado en su país del homicidio de un líder activista medioambiental, colectivo muy atacado por distintas facciones criminales de Colombia, como demuestra el reciente asesinato de un activista indígena, crimen por el que fueron detenidos dos miembros de las FARC y con el que no está relacionado el arrestado en España.
Una vez ordenado su ingreso en prisión, las autoridades colombianas deberán remitir al tribunal la documentación en la que solicitan su entrega de cara a poder celebrar una vista de extradición contra él en los próximos meses, han indicado a Efe fuentes de la Audiencia Nacional.
La Policía colombiana considera su arresto como «el resultado más importante» en la lucha contra el narcotráfico en el país, en lo que va de año. EFE
A.M.