La detención de los dos hombres, el padre de 59 años y el tío de 38, se produjo el pasado viernes día 4, tres recibir una comunicación por parte de la escuela de la localidad donde estudian las dos niñas.
A finales de la semana pasada, los responsables de ese centro tuvieron conocimiento, a través de un familiar de las pequeñas, de que sufrían abusos y, como establece el protocolo, se puso el caso en conocimiento de la policía.
A las dos niñas se les realizó una exploración para saber si las sospechas eran ciertas y se las dejó bajo tutela de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA).
Desde la DGAIA, un equipo multidisciplinar estudia cada situación en particular y, tras alejar a las víctimas del núcleo donde puede haber sufrido los abusos, se decide la mejor opción para mantenerlas a salvo de posibles riesgos, ya sea dejándolas en manos de otro familiar o dirigiéndolas a un centro de emergencia.
En este caso y al tratarse de una familia desestructurada, la opción escogida ha sido la de alojarlas en un centro de protección de menores.
Los dos detenidos pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Girona que decretó su libertad provisional a la espera de tener más información sobre los supuestos abusos.
La magistrada, de acuerdo con la petición del ministerio fiscal, acordó la libertad de los detenidos con medidas cautelares de prohibición de comunicación y aproximación a las menores y comparecencias periódicas en el juzgado. EFE
A.M.