El cabecilla de un gran organización criminal que se dedicaba a «inundar Europa con cocaína» procedente de Colombia y México, según los investigadores, ha sido trasladado este miércoles a Palma de Mallorca vía Zúrich (Suiza) para su puesta a disposición judicial en los juzgados de la capital balear.
Se trata del ciudadano albanokosovar Bashkim O., que fue detenido en Croacia con ocasión de la denominada Operación Casino-Fantauixa, que supuso el arresto de 42 personas los días 14 y 15 de febrero pasado y que fue coordinada por Europol y Eurojust.
Las detenciones se llevaron a cabo en Mallorca (España), Bélgica, Croacia y Holanda, mientras que cuatro personas más son investigadas en Italia, Croacia y Alemania.
Bashkim O. ha sido conducido este miércoles por agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional desde el avión hasta el furgón que le ha llevado a la cárcel de Palma.
El principal jefe de esta organización cuenta con una lujosa casa en Andratx frente al mar, donde residía temporalmente y presuntamente reunía a sus colaboradores más cercanos para organizar el tráfico de cocaína y el blanqueo de dinero.
Los investigadores apuntan que se trata de una de las organizaciones de narcotraficantes más importantes de Europa.
La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Palma ordenó hace unos días la prisión comunicada y sin fianza para cinco de los ocho detenidos en Mallorca.
Esta operación ha contado con la participación de 580 miembros de los cuerpos de seguridad de siete países europeos y la colaboración del FBI de Estados Unidos y la agencia NCA británica.
En Mallorca y en Barcelona se llevaron a cabo 18 registros y entradas en negocios y viviendas. La Policía y la Guardia Civil confiscaron 7 vehículos de alta gama, un yate, 86 obras de arte -óleos- por un valor superior a los 5 millones de euros, numerosos dispositivos electrónicos, 203.000 euros en efectivo, 40.000 euros en criptomonedas y 16 relojes de lujo.
Los investigadores estiman que solo el valor del «blanqueo» de dinero en Mallorca supera los 30 millones de euros en inversiones inmobiliarias.
De acuerdo con la investigación, los detenidos importaban cocaína desde Sudamérica, la introducían por puertos europeos y organizaban su transporte posterior en aviones, embarcaciones, camiones y coches.
Esta organización contaba con una «compleja estructura» societaria asentada en Mallorca que blanqueaba las ganancias ilícitas.
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