Los hechos sucedieron el pasado 28 cuando en una investigación contra el tráfico de drogas.
Los agentes llevaban varios días vigilando a un joven como presunto autor de un delito contra la salud pública.
Los policías se disponían a darle el alto, pero ante la presencia policial, no hizo caso a las señales y arremetió acelerando violentamente contra los agentes, mostrando un desprecio absoluto por sus vidas.
Dos de los policías, que se encontraban con el chaleco reflectante a pie en el camino, tuvieron que saltar y rodar por la ladera del camino hacia los matorrales para que no les atropellasen.
El tercero, aún dentro del coche, tuvo el tiempo justo para reaccionar y salir del vehículo.
El todoterreno impactó a más de cien kilómetros hora contra el vehículo policial por su parte frontal.
Tras la embestida los dos individuos huyeron sin ser localizados en ese momento, si bien fue arrestado uno de los implicados en la preparación del alijo, localizado escondido en un vivero cercano.
Los agentes intervinieron el vehículo todoterreno con los 20 fardos de hachís que portaba en su parte trasera, además de una pistola municionada.
Numerosas armas en su vivienda
Al día siguiente, y tras las investigaciones oportunas, los agentes comprobaron que el conductor implicado pernoctaba en un hotel de Jerez donde lo detuvieron.
Posteriormente, los policías registraron su domicilio en Chipiona donde localizaron un gran número de armas y munición -pistolas, revólveres, escopetas de dos cañones, una pistola de bolsillo y un subfusil de asalto AK47-.
También se intervino dinero en metálico, numerosas joyas, documentación con anotaciones y ropa oscura junto a varios pasamontañas.