La víctima, de nacionalidad británica y turista en Ibiza, denunció los hechos ante las autoridades policiales de Escocia, lugar donde reside habitualmente.
Los agentes remitieron la denuncia a la Guardia Civil que inició una investigación.
Los investigadores averiguaron que el detenido tenía antecedentes por hechos similares, y supuestamente cometía los abusos sexuales.
Las agresiones se producían en un local de tatuajes en la localidad de San Josep de Sa Talaia, donde las víctimas contrataban sus servicios, momento en el que actuaba realizando tocamientos no consentidos a las mujeres mientras les tatuaba.
Tras la puesta a disposición en el Juzgado de Instrucción nº 1 de Ibiza, en funciones de guardia, decretó el ingreso en prisión provisional sin fianza.
M.M.