El hallazgo se ha producido sobre las 08,00 horas de la mañana del lunes 19 de diciembre en una zona de monte muy próxima al lugar donde el niño vivía, cerca del Hospital Universitario de la ciudad, en el entorno de la barriada de Loma Colmenar, concretamente en un talud situado junto a un polideportivo.
El niño salió de casa a jugar al fútbol
Por la noche la familia emitió una denuncia sobre la desaparición del niño, quien había salido de casa para jugar un partido de fútbol el domingo por la tarde pero viendo que no regresaba a la vivienda fue el padre quien acudió a la policía.
La Policía Nacional ha acordonado la zona mientras que el cuerpo del niño ha sido trasladado al tanatorio municipal para la práctica de la autopsia, que permitirá revelar datos del fallecimiento.
Aparición del niño
El cuerpo apareció cerca de una pista deportiva y un aparcamiento junto a la promoción de 225 viviendas sociales que está a lado del Hospital Universitario, donde vivía, a unos 500 metros de la frontera de la ciudad con Marruecos y de la barriada de El Príncipe.
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Familiares y vecinos, destrozados
En el lugar se han concentrado familiares y vecinos del menor, destrozados por el desenlace.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Jesús Vivas (PP), ha mostrado su pesar «en nombre de todos los ceutíes» por el fallecimiento del menor, vecino de la barriada de Loma Colmenar.
“La pérdida de una vida siempre es un hecho lamentable, pero si se trata de un menor, es ya una tragedia insuperable”, ha lamentado Vivas, quien ha ofrecido a la familia asistencia psicológica.
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Ha pedido además cautela para que la Policía haga su trabajo de cara a esclarecer las causas del fallecimiento aunque se descarta que haya sido una muerte accidental.
La investigación apunta a una muerte violenta del menor pues presentaba signos de violencia, tenía un fuerte traumatismo en la cabeza y estaba semidesnudo de cintura para abajo.
Actualización a 21 de diciembre
La autopsia ha determinado que el niño ha sido asesinado por un fuerte golpe en la cabeza con un objeto contundente, se baraja también una posible violación.
Mohamed Abdeselam era el más pequeño de cuatro hermanos (tenía dos hermanos mayores de 18 y 21 años y otra hermana de 14) y cursaba 3º de Primaria en el colegio Severo Ochoa, que hoy ha lucido una bandera de España en su fachada con un crespón negro en señal de duelo.
El pequeño ha sido enterrado esta tarde ante multitud de personas en el cementerio musulmán de Sidi Embarek.
Los familiares también han concretado que vecinos de la zona han advertido de la presencia de un hombre que merodeó por la barriada y que entraba y salía del interior de un vehículo abandonado en el lugar.