Una operación llevada a cabo por agentes del Puesto de la Guardia Civil de Arganda del Rey ha culminado con el desmantelamiento de una peligrosa organización criminal especializada en el robo en el interior de vehículos de reparto de mercancía. La Comandancia de Madrid ha informado sobre este importante golpe en un comunicado oficial.
Las investigaciones se iniciaron en febrero pasado, después de que los agentes tuvieran conocimiento de un robo con fuerza en un vehículo estacionado en una calle de Arganda. Los delincuentes rompieron una de las ventanillas para acceder al interior y llevarse objetos de valor.
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Las pesquisas permitieron identificar y vincular a dos individuos con este robo, así como con otros similares en vehículos de reparto ocurridos tanto en Madrid como en Parla. Estos individuos formaban parte de una red criminal perfectamente organizada.
El modus operandi de este grupo delictivo consistía en utilizar vehículos de alquiler para realizar seguimientos y ubicar a sus víctimas. Una vez que detectaban un vehículo de reparto de alimentos o bebidas, comenzaban a seguirlo, empleando un inhibidor de frecuencia para desactivar los sistemas de seguridad del automóvil.
De este modo, aprovechaban el momento en que el conductor se disponía a entregar la mercancía en los establecimientos para perpetrar el robo.
Una vez que los autores tenían en su poder los productos robados, los entregaban a una red de receptadores que operaba en el sector de la hostelería. Estos receptadores se encargaban de darles salida en un bar situado en Parla.
Robaban en Arganda, Madrid y Parla
Hasta el momento, se ha logrado establecer la participación de esta banda en una decena de casos relacionados con robos con fuerza en vehículos de reparto en Arganda del Rey, Madrid y Parla.
Además, durante los registros hechos en los domicilios de los detenidos, los agentes encontraron indicios que los vinculan con el robo en una tienda y en un estanco en la provincia de Zamora.
Los detenidos, un total de siete personas, están compuestos por seis hombres y una mujer, de nacionalidad española y magrebí, con edades comprendidas entre los 26 y 49 años.
Residen en Parla, Madrid y Torrejón de la Calzada, y cuentan con antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio. Se les imputa un delito de pertenencia a grupo criminal, diez delitos de robo con fuerza en el interior de vehículos y nueve delitos de receptación.