El martes pasado, en la localidad sevillana de Dos Hermanas, una operación de la Policía Nacional concluyó con el arresto de un individuo acusado de revelar información confidencial y estafa reiterada, además de poseer y almacenar armas de guerra y municiones.
Todo comenzó en noviembre del año pasado cuando se informó a la policía de múltiples ataques cibernéticos a los sistemas informáticos de entidades públicas como el Consejo General del Poder Judicial y la Agencia Estatal de Administración Tributaria, entre otros.
El equipo de la Comisaría General de Información, expertos en ciberseguridad, rastrearon a uno de los autores de estos ataques, un joven con una larga historia en ciberdelincuencia, que fue arrestado en Madrid el pasado 31 de marzo. Había creado una plataforma llamada «Ojo de Horus», donde almacenaba datos personales obtenidos ilegalmente a través de estos ataques. Ofrecía este servicio como un lugar de consulta y venta de información a terceros. Tras dos meses de investigación, se identificó a un segundo sospechoso que colaboró con el primero en la obtención ilegal de las credenciales para realizar los ciberataques.
Se descubrió que el sospechoso había comprado ilegalmente al menos 30 paquetes de datos, con más de 15.000 registros personales y bancarios de contribuyentes españoles. Utilizaba varias identidades digitales para administrar una red de contactos que llevaban a cabo diversas actividades ilegales en línea, de las que obtenía beneficios económicos. Uno de los métodos que usaba era el smishing, que consiste en enviar un SMS haciéndose pasar por una entidad legítima, con el objetivo de robar información personal o hacer cargos económicos a la víctima.
En el momento de su arresto, el sospechoso tenía en su computadora una plataforma de envío masivo de SMS abierta y activa, además de 24 teléfonos móviles y 114 tarjetas SIM listas para usar. Sin embargo, no sólo tenía contactos criminales en línea, sino que también se encontraron tres armas de fuego en su casa, lo que evidencia su alta peligrosidad.
Armas listas para ser usadas
En el momento del arresto se practicó un registro en su domicilio, donde se encontraron numerosos documentos y objetos que aún se están analizando. La policía destaca la gran cantidad de dispositivos técnicos encontrados, incluyendo casi 30 móviles, ordenadores y tarjetas SIM. Además, se encontraron un subfusil, una pistola y una escopeta, todos ellos cargados y listos para ser usados. Además, los sospechosos llevaban un estilo de vida lujoso, con joyas de oro, relojes y vehículos de alta gama.
Durante el registro, se incautaron muchos criptoactivos y se descubrió que durante 2022 el sospechoso había tenido más de 1,2 millones de euros en criptoactivos a través de ocho carteras de bitcoin diferentes.
El jueves por la mañana, el sospechoso fue presentado ante el juez del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, que decretó su ingreso en prisión.
La investigación fue realizada por agentes de la Comisaría General de Información, coordinada por la Fiscalía de la Audiencia Nacional y dirigida por el Juzgado Central de Instrucción 4. También contó con la colaboración de la Brigada Provincial de Información de Sevilla, la Comisaría de la Policía Nacional de Dos Hermanas y el Centro Criptológico Nacional.
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