En el misterioso caso de los restos óseos hallados en Mazaricos, A Coruña, la Policía Judicial de la Guardia Civil ha descubierto una nueva bolsa de basura a unos cien metros del lugar donde se encontraron inicialmente cinco bolsas con restos óseos y ropa. La investigación sigue centrada en determinar si estos restos pertenecen a Antonio Tuñas Vieites, un vecino desaparecido de 72 años, o a otra persona desaparecida en la misma región.
Dentro de la nueva bolsa, se encontraron un fémur, restos de costillas y otros huesos, según informa la prensa local. La incertidumbre persiste respecto a la identidad de los restos, y se investiga la posible conexión con la desaparición de Javier Iglesias Otero, quien también está ausente desde el 5 de mayo.
La hipótesis principal que manejan los investigadores es que la misma persona estuvo involucrada en la disposición de ambos cadáveres. Este modus operandi incluiría desmembrar los cuerpos, colocarlos en pequeñas bolsas de basura y arrojarlos a lo largo de una cuneta de difícil acceso entre los núcleos de Chacín y San Lourenzo.
Ante estos nuevos descubrimientos, los equipos de búsqueda han ampliado el radio de investigación y han empleado una pala para retirar restos de varias cortas de madera en la zona. La investigación sigue en curso para arrojar luz sobre este enigma y determinar la identidad de los restos óseos encontrados.