La Palma tiene dos fallas activas que fueron las responsables de la erupción del volcán Tajogaite en 2021. Además, se trata de las primeras que se localizan en el archipiélago, porque hasta ahora se pensaba que no había fallas activas en Canarias.
El 19 de septiembre de 2021 se produjo la erupción en La Palma del volcán que recientemente ha sido bautizado como Tajogaite, a pesar de que en un primer momento se consideró como el volcán de Cumbre Vieja por el entorno en el que se localizaba. La erupción duró 85 días y fue una de las mayores tragedias de La Palma. Incluso hay vecinos que sufren las consecuencias hoy en día.
Ha sido ahora, dos años y medio después de la erupción, cuando han encontrado dos fallas activas, según ha relevado El País. El geólogo Miguel Ángela Rodríguez-Pascua, del Instituo Geológico y Minero de España, ha sido el encargado de confirmarlo.
«Estas son las primeras que se han identificado en el archipiélago. Sin ellas, no habría habido una erupción como la que hubo en La Palma«, reconoce. Además, explica que «hasta ahora se pensaba que en Canarias no había fallas activas».
Las dos fallas activas encontradas han sido bautizadas como Tazacorte y Mazo. Atraviesan la isla de lado a lado y provocan grietas en los edificios. Precisamente así han podido localizarlas para ayudar a entender la erupción del volcán y las consecuencias posteriores.
Un vecino de El Paso le explicó al geólogo que su casa estaba llena de grietas y que aunque las tapara, siempre volvían a salir. Y así lleva desde 1989. El experto ha constadado que estas grietas también están persentes en vallas, aceras y paredes de muchas edificaciones. Ahora, han encontrado la existencia de estas dos fallas y habría diez casas, como mínimo, situadas sobre ellas.
Otro aspecto clave para entender el alcance es que estas fallas apuntan a ser las más rápidas de todo el territorio español, pues se mueven unos tres milímetros al año. El movimiento es el triple que la falla de Carboneras, que también es una de las más rápidas de la Península.
Las fallas atraviesan la isla de La Palma de lado a lado. La de Tazacorte tiene unos 8,5 kilómetros desde la costa hasta el cono volcánico, además de 20 kilómetros hacia la vertiente contraria de la isla. La falla de Mazo tiene unos 6 kilómetros hasta el cráter del volcán y otros 16 kolómetros hacia la zona opuesta. De momento, el movimiento es mínimo que no es suficiente para provocar terremotos o daños mayores, aunque sí puede agrietar las construcciones.