En un juicio que ha conmocionado a la opinión pública, Christopher Gregor, de 31 años, se encuentra en la corte Superior de Ocean City enfrentando acusaciones por la muerte de su hijo de seis años. El trágico suceso tuvo lugar en marzo de 2021, cuando el padre, bajo la creencia de que su hijo estaba «demasiado gordo», lo obligó a correr en una cinta de gimnasio.
Según los informes del medio ‘New York Post’, el menor, Corey Micciolo, acompañó a su padre al gimnasio donde se encontraron con la tragedia. Las imágenes de las cámaras de seguridad del lugar muestran a Gregor obligando al niño a subirse repetidamente a la cinta, incluso manipulando la máquina para aumentar la velocidad e inclinación, a pesar de las caídas del niño.
En el juicio, la madre del niño, Bre Micciolo, ha testificado sobre los eventos previos a la muerte de su hijo. Ella había notado heridas en el pequeño y, preocupada, notificó a los servicios de protección de menores. Corey reveló durante una consulta médica que su padre lo hacía correr porque consideraba que estaba «demasiado gordo».
El día siguiente a la consulta médica, el niño fue llevado al hospital por su padre debido a síntomas preocupantes, como dificultad para respirar y náuseas, y finalmente falleció tras convulsionar durante un examen médico.
La autopsia reveló que la muerte fue el resultado de abuso crónico, con heridas que incluían impacto contundente en el pecho y el abdomen, laceración en el corazón, contusión pulmonar y lesiones en el hígado.
Christopher Gregor fue arrestado el 9 de marzo de 2022 por la muerte de su hijo, y el juicio continúa sin una sentencia definitiva.
El dolor y la conmoción de la madre se hicieron evidentes durante el juicio, donde recordó los momentos difíciles que vivió su hijo. La autopsia ha respaldado la teoría de que el niño murió como resultado de años de presuntos abusos. Ahora, tres años después de la tragedia, su padre enfrenta la posibilidad de cadena perpetua por homicidio.